Dinamarca aumentará significativamente su presupuesto de defensa y tratará de independizarse del gas natural ruso en respuesta a la invasión rusa de Ucrania, dijo el domingo la primera ministra danesa, Mette Frederiksen.
El país nórdico aumentará gradualmente su gasto en defensa hasta alcanzar el 2% del PIB en 2033, lo que equivale a un aumento del gasto anual en defensa de unos 18.000 millones de coronas danesas (2.650 millones de dólares) en virtud de un acuerdo entre los principales partidos parlamentarios.
El gobierno danés también anunció que reservará reservar unos 1.000 millones de dólares durante los próximos dos años para fortalecer la defensa, la diplomacia y los esfuerzos humanitarios daneses.
“Los tiempos históricos exigen decisiones históricas”, dijo Frederiksen en una conferencia de prensa en Copenhague, y agregó que esta fue “la mayor inversión en defensa danesa en los últimos tiempos”.
Dinamarca, miembro de la OTAN, acordó en 2019 aumentar el gasto militar del 1,35 % de su producción económica al 1,5 % para 2023, pero Estados Unidos la presionó para alcanzar el objetivo de la OTAN del 2 %.
Alemania dijo la semana pasada que aumentaría drásticamente su gasto en defensa a más del 2% del PIB y reducirá rápidamente su dependencia de la energía rusa.
“El ataque brutal y sin sentido de Putin contra Ucrania ha anunciado una nueva era en Europa, una nueva realidad”, dijo Frederiksen.
“La lucha de Ucrania no es solo de Ucrania, es una prueba de fuerza para todo en lo que creemos, nuestros valores, democracia, derechos humanos, paz y libertad”, agregó.
Para acomodar un mayor gasto en defensa, las restricciones presupuestarias actuales de Dinamarca se aliviarán y el déficit se volverá negativo después de 2025.
Frederiksen dijo que los principales partidos parlamentarios acordaron que Dinamarca debería independizarse del gas ruso “lo antes posible”, aunque no se estipuló un plazo.
También acordaron que se debe realizar un referéndum el 1 de junio sobre si participar en la Política Común de Seguridad y Defensa (CSDP, por sus siglas en inglés) de la Unión Europea, casi 30 años después de que los daneses optaran por no participar.
“El mundo ha cambiado los últimos diez días. Hay una Europa antes y una Europa después del 24 de febrero”, dijo Frederiksen.
La participación en la CSDP permitiría a Dinamarca participar en operaciones militares conjuntas de la UE y cooperar en el desarrollo y adquisición de capacidades militares dentro del marco de la UE.
Dinamarca rechazó en 1992 en referendo el tratado de Maastricht, aunque un año después aprobó una versión alternativa con excepciones a la política común en cuatro áreas: unión monetaria y económica, defensa, cooperación policial y jurídica y ciudadanía, aunque esta última se considera intrascendente tras el tratado de Amsterdam.
Los daneses rechazaron en dos consultas posteriores unirse al euro y abandonar la corona, en 2000, y abolir la excepción en el área jurídica, en 2015.
Que la UE carezca de ejército propio y que Dinamarca sea miembro de la OTAN hacen no obstante que los efectos de esa excepción sean limitados.
“Para mí como primera ministra es más una decisión de valores, de querer formar parte de la política común sin excepciones”, admitió Frederiksen.
(Con información de Reuters y EFE)
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