El consejo de seguridad ucraniano pidió este miércoles que se instaure el estado de emergencia en el país, coincidiendo con la invasión de Rusia a los territorios del este y la posible agresión militar,
“El Parlamento ucraniano debe dar su visto bueno a esta decisión en las próximas 48 horas”, declaró el secretario del Consejo de seguridad y de defensa nacional, Oleksii Danilov.
Gracias a este mecanismo, las autoridades van a poder “incrementar la protección” del orden público y el de las infraestructuras estratégicas, “limitar la circulación, intensificar la verificación de vehículos y de documentos de individuos”, explicó Danilov.
Se trata de “medidas de prevención para preservar la calma en el país, para que la economía siga funcionando”, agregó. “No tendrá impacto en nuestra vida diaria”, garantizó.
Poco antes, Ucrania anunció la movilización de sus reservistas y pidió a los ciudadanos que salgan inmediatamente de Rusia.
La amenaza de una intervención militar por parte de Rusia sigue aumentando ya que el presidente Vladimir Putin insiste en que las garantías que ha reclamado en materia de seguridad no han sido escuchadas por los países occidentales.
Estos anuncios son el último capítulo en la escalada de tensiones entre Ucrania y Rusia, que constituye la peor crisis geopolítica en Europa desde el final de la Guerra Fría.
Desde hace semanas, Rusia desplegó en la frontera con Ucrania unos 150.000 soldados y el lunes reconoció la independencia de dos territorios separatistas del este de Ucrania: las autoproclamadas ‘repúblicas’ de Donetsk y Lugansk. Esto atizó las acusaciones de que prepara un ataque a gran escala contra el país vecino.
Este miércoles, en la línea de frente seguían los combates entre el ejército de Ucrania y los separatistas.
“Comenzaron a disparar con más fuerza”, contó a la AFP Dmitri Maksimenko un minero del pequeño pueblo de Krasnogórivka, situado cerca del frente.
El hombre afirmó estar “conmocionado” con la noticia de que Rusia reconoció la independencia de los separatistas. “No sé qué va a pasar, pero honestamente, tengo un poco de miedo”, admitió.
Los separatistas de Lugansk anunciaron el miércoles la muerte de un combatiente, alcanzado por el disparo de un francotirador ucraniano, según ellos. Según los rebeldes, un civil también falleció en un bombardeo.
El martes, el presidente ucraniano Volodimir Zelenski, que pidió “armas” y garantías sobre una adhesión a la Unión Europea, también mencionó la posibilidad de romper relaciones diplomáticas con Moscú.
En Rusia, Putin, pese a la cascada de sanciones anunciadas en la víspera por los occidentales, prometió que no cederá en sus exigencias y afirmó “los intereses y la seguridad” de sus ciudadanos “no son negociables”.
El mandatario habló en un breve discurso televisado por el Día del Defensor de la Patria en el que dijo, sin embargo, estar “abierto a un diálogo directo” con los países occidentales, pero siempre exigiendo que Ucrania no sea jamás admitida en la OTAN.
El miedo a una escalada militar a las puertas de la Unión Europea (UE) sigue aumentando desde que el lunes Putin reconoció la independencia de dos territorios separatistas del este de Ucrania y el Parlamento ruso aprobó después los acuerdos que enmarcan esta declaración y que se traducen en diversos compromisos con estos rebeldes ucranianos prorrusos.
Este texto prevé el envío de una fuerza de “mantenimiento de la paz” a estos territorios que forman parte de Ucrania, lo que da una luz verde para una posible operación militar.
(Con información de AFP)
Seguir leyendo: