Una investigación reciente reveló que Beijing intervino en las elecciones federales en Canadá, que se celebraron el pasado 20 de septiembre, con una campaña de desinformación que estuvo dirigida en su mayoría a canadienses de ascendencia chino.
La revelación, sin embargo, no pudo establecer cuán determinante fue la intervención china en las elecciones canadienses y si tuvo algún consecuencia definitiva en el resultado, informó el medio Ottawa Citizen.
“Después de analizar los datos de código abierto disponibles y consultar con las partes interesadas clave, creemos que el momento y el contenido de las narrativas indican la probabilidad de una operación de influencia coordinada dirigida a los votantes chino-canadienses”, informó DesinfoWatch, un grupo de investigación canadiense.
La operación de desinformación fue similar a una ejecutada durante las elecciones en Taiwán celebradas en enero de 2020. Las principales vías de desinformación que empleó Beijing en sus esfuerzos por manipular el voto taiwanés fueron a través de las plataformas de chat privadas. En el caso de Canadá, el objetivo principal fue el Partido Conservador.
Lo encontrado por DesinfoWatch está respaldado por una investigación llevado acabo por Atlantic Council’s Forensic Research Lab.
“Los actores vinculados a China asumieron un papel activo en la búsqueda de influir en las elecciones parlamentarias del 20 de septiembre de 2021 en Canadá, mostrando signos de una campaña coordinada para influir en el comportamiento de la diáspora china que vota en las elecciones”, afirma un informe de Atlantic Council’s Forensic Research Lab.
DisinfoWatch señala un artículo del 9 de septiembre publicado en la plataforma de propaganda china Global Times que advierte que una victoria de los conservadores invitaría a “un fuerte contraataque, y Canadá será el que sufrirá”. Luego de la publicación, comenzó una campaña de desinformación a través de WeChat, la cual alberga aproximadamente a un millón de canadienses de origen chino.
Según Ottawa Citizen, el Partido Liberal, al que pertenece el primer ministro Justin Trudeau, no tenía una política clara para contrarrestar las crecientes amenazas de Beijing al orden mundial, mientras los conservadores presentaron una serie de medidas destinadas a proteger a los inmigrantes chinos de la intimidación y el acoso de China. Además, prometieron varias iniciativas, incluidas sanciones generalizadas a los funcionarios chinos involucrados en la persecución de los uigures y tibetanos oprimidos de Xinjiang. Y se comprometieron a mantener una línea dura contra las empresas estatales chinas que operan en Canadá.
Durante los meses antes de las elecciones, el candidato conservador Kenny Chiu sufrió una campaña de desprestigio que incluía todo tipo acusaciones falsas. Su campaña nunca se recuperó.
Las estrategias de China para esparcir desinformación en el mundo no son nuevas. En diciembre, Meta Platforms Inc. dijo que eliminó una red con sede en China de más de 500 cuentas de Facebook que buscaban impulsar una narrativa falsa sobre los intentos del Gobierno de Estados Unidos de culpar a China de la pandemia de covid-19.
La campaña involucraba al personaje falso de un biólogo suizo llamado Wilson Edwards, quien en julio publicó en Facebook y Twitter que EEUU estaba presionando a científicos de Organización Mundial de la Salud (OMS) para que culparan a China del virus, según el informe mensual de Meta sobre operaciones de influencia coordinadas en sus redes sociales.
A los pocos días de la primera publicación, cientos de cuentas de redes sociales y un puñado de fuentes de medios estatales chinos amplificaron la historia sobre la presunta intimidación estadounidense, dijo Meta. Pero al mes siguiente, la embajada de Suiza en Beijing indicó que no había ningún ciudadano suizo con el nombre de Wilson Edwards, dijo la compañía. Facebook investigó y eliminó la cuenta el mismo día.
Meta dijo que eliminó 524 cuentas de Facebook, 20 páginas, cuatro grupos y 86 cuentas de Instagram involucradas en la campaña, según el informe. La compañía con sede en Menlo Park, California, dijo que encontró conexiones entre la red y las personas en China, incluidos empleados de Sichuan Silence Information Technology Co. Autoridades chinas también parecían interactuar con el contenido publicado por la red.
Meta, antes conocida como Facebook Inc., dijo que estos actores siguen cambiando sus tácticas para evadir la detección y las medidas de la aplicación. Una de esas estrategias se conoce como “brigada”, en la que las cuentas adversarias trabajan juntas para publicar o comentar en masa en un intento por acosar o silenciar a determinados usuarios. Otra táctica que emplean estas redes consiste en enviar una avalancha de informes sobre una cuenta o contenido para que Meta lo elimine.
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