La curiosa estrategia de Nueva Zelanda para que los manifestantes abandonen las protestas contra la vacunación

El presidente del Parlamento de Wellington reprodujo la canción “Macarena” en ciclos de 15 minutos junto a los éxitos de Manilow y mensajes educativos sobre la covid-19 y la importancia de las vacunas

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Cientos de personas se manifiestan contra los mandatos de vacunación contra el coronavirus a pesar de la lluvia, cerca del edificio del parlamento en Wellington, Nueva Zelanda (Cortesía de Charlie Coppinger/vía REUTERS)
Cientos de personas se manifiestan contra los mandatos de vacunación contra el coronavirus a pesar de la lluvia, cerca del edificio del parlamento en Wellington, Nueva Zelanda (Cortesía de Charlie Coppinger/vía REUTERS)

Las autoridades de Nueva Zelanda han reproducido en bucle la canción “Macarena” y los éxitos del cantante estadounidense Barrry Manilow para tratar de desanimar a los cientos de manifestantes que este domingo ocupan por sexto día consecutivo los aledaños del Parlamento para protestar contra la obligatoriedad de las vacunas.

Según el periódico New Zealand Herald, el presidente del Parlamento de Wellington, Trevor Mallard, empezó el sábado a reproducir por megafonía a alto volumen y en bucle la canción compuesta por Los del Río en ciclos de 15 minutos junto a los éxitos de Manilow y mensajes educativos sobre la covid-19 y la importancia de las vacunas.

Sin embargo, los manifestantes respondieron reproduciendo música en sus propios altavoces para neutralizar el sonido de la megafonía, como la canción “We’re Not Gonna Take It”, de Twister Sister, y tocando la bocina de un camión para mantener viva esta protesta contra la obligatoriedad de las vacunas, inspirada en los camioneros canadienses por el bloqueo del puente internacional que conecta Canadá y Estados Unidos.

La medida disuasoria ha provocado multitud de reacciones en redes sociales, entre ellas la del cantante británico James Blunt, quien, en un mensaje irónico de Twitter, pidió que se le tenga en cuenta si no funciona la música elegida.

La policía hace un cordón frente a los manifestantes que protestan contra los mandatos de vacunación en Nueva Zelanda (Cortesía de Charlie Coppinger/vía REUTERS)
La policía hace un cordón frente a los manifestantes que protestan contra los mandatos de vacunación en Nueva Zelanda (Cortesía de Charlie Coppinger/vía REUTERS)

Ni estas medidas de presión no violentas ni el temporal que azota desde el sábado Wellington, con fuertes lluvias y vientos de hasta 130 kilómetros por hora, hicieron desistir a los cientos de manifestantes que llevan seis días acampados frente al Parlamento.

La policía ha estado adoptando un enfoque más de no intervención desde el jueves, cuando arrestó a 122 personas y acusó a muchas de ellas de allanamiento de morada u obstrucción. La policía, que ha portado chalecos protectores pero no ha utilizado equipos antidisturbios o portado armas, había tratado de avanzar lentamente sobre los manifestantes.

Un hombre usa un megáfono junto a la policía de Nueva Zelanda mientras la gente se reúne frente al edificio del Parlamento, en Wellington (Cortesía de Charlie Coppinger/vía REUTERS)
Un hombre usa un megáfono junto a la policía de Nueva Zelanda mientras la gente se reúne frente al edificio del Parlamento, en Wellington (Cortesía de Charlie Coppinger/vía REUTERS)

Pero eso resultó en una serie de confrontaciones físicas. Un video de dos mujeres oficiales arrastrando brevemente a una mujer desnuda por el cabello en medio de una pelea se volvió viral.

En una respuesta a las preguntas de The Associated Press, la policía de Nueva Zelanda dijo que no se quitó la ropa de la mujer como algunas personas habían afirmado en línea, y que había estado desnuda durante “algún tiempo” antes de su arresto. La policía también dijo que las imágenes y videos no proporcionaban el contexto completo de la actividad de protesta o la situación que enfrentaba la policía.

Un hombre participa en una protesta mientras la gente continúa reuniéndose en los terrenos del edificio del Parlamento, en Wellington (Cortesía de Charlie Coppinger/vía REUTERS)
Un hombre participa en una protesta mientras la gente continúa reuniéndose en los terrenos del edificio del Parlamento, en Wellington (Cortesía de Charlie Coppinger/vía REUTERS)

Aún así, las peleas parecieron provocar un replanteamiento estratégico por parte de la policía, que parecía más contenta de esperar a medida que avanzaba la semana. Pero para el viernes, Mallard, el presidente del Parlamento, había visto lo suficiente y le dijo al personal que encendiera los rociadores durante la noche.

Algunos de los vehículos de los manifestantes han permanecido estacionados en medio de las calles alrededor del Parlamento, lo que ha obligado a cerrar algunas calles. La Biblioteca Nacional y muchos cafés y bares de la zona han cerrado sus puertas mientras se desarrolla la protesta. La policía reportó que un manifestante tuvo un evento médico el viernes por la noche y una ambulancia no pudo llegar a él debido a los vehículos que bloqueaban las calles, lo que resultó en un retraso antes de que fuera tratado.

Nueva Zelanda, cuyo gobierno implementó una de las estrategias contra la covid-19 más estrictas del mundo con confinamientos con pocas infecciones y el cierre de las fronteras internacionales, acumula 19.777 infecciones de covid-19 y 53 fallecidos, y tiene a un 94 % de la población diana con la pauta completa.

El Gobierno de la laborista Jacinda Ardern, que fue aplaudida mundialmente al inicio de la pandemia por su gestión de la covid-19, ha anunciado la reapertura escalonada de las fronteras internacionales, lo que incluirá a los turistas extranjeros entre julio y octubre.

(con información de EFE y AP)

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