El presidente francés, Emmanuel Macron, pidió este domingo a su homólogo iraní, Ebrahim Raisi, que muestre una disposición “constructiva” en las negociaciones sobre su programa nuclear militar y que aplique completamente las obligaciones que le fija el acuerdo firmado en 2015.
En la “larga” conversación telefónica que mantuvieron los dos jefes de Estado, según explicó el Elíseo en un comunicado, Macron reiteró su convicción de que “es posible e imperativa una solución diplomática” en ese asunto.
También de que para que las negociaciones se salden con un compromiso serán necesarios “compromisos claros y suficientes de todas las partes”. Afirmó que Francia está trabajando para eso con el conjunto de los países implicados.
Teherán está discutiendo desde hace unos meses en Viena con Alemania, Francia, Reino Unido, China y Rusia, así como con Estados Unidos de forma indirecta, sobre la forma de salvar el acuerdo de 2015.
Ese pacto establecía una serie de restricciones al programa nuclear iraní destinadas a evitar que ese país se dote de la bomba atómica a cambio del levantamiento progresivo de las sanciones que pesan fuertemente sobre su economía.
Sin embargo, después de llegar a la presidencia de Estados Unidos en 2017, Donald Trump retiró en 2018 a su país del acuerdo internacional e impuso de nuevo sanciones a Teherán, que replicó un año después incumpliendo los límites impuestos a su programa nuclear con una mayor acumulación de uranio enriquecido.
El objetivo de las conversaciones actuales en Viena es que Estados Unidos, desde 2021 bajo la batuta del presidente Joe Biden, vuelva a integrarse en el acuerdo y que Irán cumpla las restricciones al desarrollo nuclear de nuevo plenamente, para lo que pide el levantamiento de las sanciones.
“Varios meses después de la reanudación de las negociaciones en Viena, insistió en la necesidad de acelerar para lograr rápidamente avances tangibles”, agregó el texto del gobierno francés.
Por su parte, la presidencia iraní dijo, en un comunicado tras el diálogo con Macron, que “en las negociaciones, la República Islámica ha demostrado su voluntad y seriedad para alcanzar un acuerdo, y cualquier esfuerzo de la otra parte en este sentido debe incluir el levantamiento de las sanciones, la verificación y garantías significativas”.
Macron y Raisi también hablaron de otras cuestiones internacionales, sobre todo de la situación en el Líbano y de las condiciones de seguridad en el Golfo Pérsico.
El presidente francés, según el Elíseo, condenó “firmemente” los recientes ataques contra los Emiratos Árabes Unidos de los rebeldes hutíes del Yemen, apoyados por Irán. Los dos jefes de Estado -siempre de acuerdo con las mismas fuentes francesas- estuvieron de acuerdo en que hay que encontrar “una solución política” al conflicto en Yemen.
Macron aprovechó la conversación con Raisi para manifestar su “preocupación” por la situación del francés Benjamin Briere y por el nuevo encarcelamiento de la investigadora Fariba Adelkhah, para la que reclamó “la liberación inmediata”.
Brière fue condenado a ocho años de cárcel en Irán esta semana por espionaje y a ocho meses por propaganda contra el régimen de Teherán. Una sentencia que las autoridades francesas han calificado de “inaceptable” porque “no se sustenta en nada”.
Este hombre de 36 años, que según París se encontraba en Irán haciendo turismo, fue detenido en mayo de 2020 por utilizar un dron con cámara y tomar imágenes de unas áreas que Irán considera prohibidas en una zona desértica cerca de la frontera con Turkmenistán.
La antropóloga franco-iraní Fariba Adelkhah había sido condenada en 2020 a cinco años de cárcel en Irán por “colusión para atentar contra la seguridad nacional”. Desde octubre de 2021 ya no estaba entre rejas, sino bajo arresto domiciliario en Teherán, controlada con brazalete electrónico.
Sin embargo, la semana pasada fue encarcelada de nuevo con el argumento de que había violado el régimen de arresto domiciliario repetidamente.
(Con información de EFE)
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