El CEO de Tesla, Elon Musk, dio una nueva muestra de sus habilidades de comunicación en medio de una entrevista realizada por el investigador de inteligencia artificial y podcaster, Lex Fridman. Ante el cuestionamiento, Musk apenas emitió un breve sonido antes de cerrar su boca y pensar. Se mantuvo inmutable durante 21 segundos y luego rompió el silencio con una breve pero concisa respuesta.
“¿Cuándo crees que SpaceX llevará a que un ser humano aterrice en Marte?”, fue la pregunta ante la que Musk guardó silencio, pero no por no tener una respuesta certera, sino para ofrecer una información razonable.
Es así como el multimillonario dueño de Tesla, integrante de la lista de brillantes empresarios tecnológicos, practicó en la entrevista la técnica conocida “el silencio incómodo”.
Sobre el uso de este recurso, Musk dijo en una entrevista que, “si le haces una pregunta seria, la considerará. Y entrará como en un trance, mirará a la nada y podrá ver cómo giran las tuercas. Está concentrando todo su intelecto en este tema”. No es raro ver en entrevistas en vivo cómo se toma unos 15 segundos antes de responder, un espacio que ocupa con suspiros y miradas que descartan una distracción, si no resaltan un máximo interés.
Aunque para algunas personas hacer una pausa silenciosa durante una conversación no suele ser una práctica cómoda, su aplicación es considerada como una habilidad útil en los procesos de diálogo que permite una reflexión sobre la posible respuesta a ofrecer.
Durante los últimos años los grandes magnates del siglo XXI han dejado en evidencia las cualidades de liderazgo y comunicación que los han conducido a ser empresarios exitosos.
LA REGLA DEL SILENCIO INCÓMODO
Justin Bariso, autor sobre inteligencia emocional, define como “la regla del silencio incómodo” a intervalos de más de 10 o 20 segundos para dar con la respuesta más apropiada. Momentos que pueden parecer una eternidad para un periodista ansioso o un empleado nervioso frente a un jefe de este calibre, pero se convierten en la huella de los ejecutivos exitosos.
Pero Musk no es el único empresario conocido por el uso de este recurso.
Los gurús tecnológicos suelen ser muy distintos entre sí, pero generalmente comparten algunas características que podrían explicar parte de su éxito.
Es el caso de los actuales líderes de dos de las compañías mejor valuadas del mundo, Apple y Amazon: tanto Tim Cook como Jeff Bezos son conocidos por su inusual costumbre de causar prolongados silencios que, en ocasiones, desconciertan a los presentes.
Bezos emplea un método diferente, según repasó en entrevista con la revista Fortune. En reuniones con sus empleados, habitualmente no comienza con una presentación, sino que se limita a leer en silencio los documentos y memorándums (que ya han sido repartidos antes) y da un espacio de hasta ¡30 minutos! para que todos hagan lo mismo, anotando sus dudas e ideas, sin interrupción. ¿Podría hacerse en privado? Eso echaría a perder la intención. “Para los empleados nuevos, es una extraña experiencia inicial. No están acostumbrados a sentarse en silencio en una sala y estudiar con un grupo de ejecutivos”, comentó Bezos.
Cook, por su parte, es “conocido por sus largas e incómodas pausas, en las que lo único que se escucha es el envoltorio de las barras de energía que constantemente come”, según otro perfil de Fortune.
Pero, ¿Se trata simplemente de tener más tiempo para pensar? Bariso explica que va mucho más allá. “Permite equilibrar las ideas y las emociones, en lugar de simplemente reaccionar en base a lo que uno siente. Pero hoy, esa regla es más valiosa que nunca por cómo ha cambiado el mundo en la última década”, aseguró.
“Cuando usas la regla, estás recuperando el tiempo que solía desperdiciarse en respuestas sin sentido. Te sorprenderías de cuánto puede lograr el cerebro en esos 10 o 20 segundos”, apuntó el consultor. Resistir la urgencia por una respuesta inmediata beneficiará a todas las partes.
SEGUIR LEYENDO: