El Gobierno francés dejará de pagar a partir de este viernes los test PCR o de antígenos para detectar el coronavirus a los ciudadanos que no estén vacunados, salvo que tengan una prescripción médica o sean menores, a quienes todavía no se ha inmunizado.
Hasta ahora, Francia pagaba la totalidad de los test, que se cobraban en los laboratorios privados porque pasaban después la factura a la Seguridad Social.
Esta medida provocaba que muchos franceses no quisieran vacunarse, porque un test negativo les permitía también tener el pase sanitario que da acceso a buena parte de los recintos del país.
El primer ministro, Jean Castex, consideró en una entrevista a Les Echos que “no es legítimo que se paguen test de confort a cargo del contribuyente”.
El Ministerio de Sanidad ha fijado en 44 euros (51 dólares) el precio de los test PCR y 22 el de los antígenos, que aumentan a 25 en caso de hacerse en farmacias, donde podrán cobrar algo más si los efectúan en días festivos.
El Gobierno, que en julio pasado ya anunció que los test no serían gratuitos para los turistas, pretende así ahorrar al menos 3.400 millones de euros (3.900 millones de dólares).
El presidente francés, Emmanuel Macron, anunció a mediados de julio que los test ya no serían gratuitos para los no vacunados, así como la obligación del pase sanitario para los accesos a buena parte de los recintos cerrados y la obligatoriedad de vacunarse para sanitarios y personal que estuviera en contacto con personas vulnerables.
Desde ese anuncio, 20 millones de franceses acudieron a vacunarse.
Según el Ministerio, entre marzo de 2020 y agosto de 2021 se hicieron en el país 95 millones de test PCR y 40 millones de antígenos.
El Ejecutivo calcula que en 2021 la factura de estos test estará entre los 5.000 y los 6.000 millones de euros (5.800 y 6.900 millones de dólares), tras los 2.600 millones correspondientes a 2020, una partida que espera reducir hasta los 1.600 millones para el año próximo.
Además del ahorro, la medida también tiene como objetivo convencer a los aproximadamente seis millones de adultos que todavía no se han vacunado a que lo hagan.
(Con información de EFE)
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