La firma de investigación Cornwall Insight dijo en un nuevo informe, que las facturas de energía en el Reino Unido podrían aumentar hasta un 30% si los precios del gas y la electricidad continúan al alza y más proveedores quebraran.
El pronóstico realizado estipula que el límite del precio de la energía, establecido en un récord de £ 1.277 (1.737 dólares) al año a partir del 1 de octubre, tendrá que incrementarse significativamente en la primavera de 2022 a medida que continúe la crisis energética.
Según una nota publicada en el diario británico The Guardian, la firma espera que el regulador de la industria aumente el precio máximo de la energía en aproximadamente un 30%, a aproximadamente £ 1,660 (2.257 dólares).
La Oficina de Mercados de Gas y Electricidad (Ofgem) ha dicho que si los precios de la gasolina suben o se mantienen en niveles tan elevados, tendrá que aumentar el precio máximo cuando se revise el 1 de abril.
“Con los precios mayoristas del gas y la electricidad que continúan alcanzando nuevos récords, las sucesivas salidas de proveedores durante septiembre y un nuevo nivel para el tope tarifario predeterminado, el mercado energético de Gran Bretaña sigue al borde de una nueva volatilidad y una mayor consolidación”, dijo Craig Lowrey, un consultor senior en Cornwall Insight, al medio británico.
Según el informe, nueve proveedores se han derrumbado en las últimas semanas después de verse incapaces de mantener las promesas de precios ante el aumento de los precios mayoristas del gas. Además, se predice que podrían llegar a ser más.
Por otro lado, el fundador del proveedor de energía verde Ecotricity dijo que “no tiene sentido” tener un límite de precio minorista pero no uno mayorista, y acusó al gobierno de “matar empresas de energía en este momento”.
CRISIS ENERGÉTICA EN LA UE
El grupo de 27 países importa en torno al 90% del gas natural que consume, en comparación con Estados Unidos, que produce el suyo y donde los precios son más bajos.
En los últimos días, Francia y España han liderado la campaña a favor de hacer cambios en las normas que regulan los mercados energéticos de la UE, mientras las subidas de precio impulsaban unas facturas de suministros ya elevadas y aumentaban la presión sobre mucha gente afectada por la pandemia del coronavirus.
“Proporcionar un apoyo dirigido a los consumidores, pagos directos a los más expuestos a la pobreza energética, recortar impuestos a la energía, cambios en el sistema tributario general, todas son medidas que se pueden tomar muy deprisa bajo las normas de la UE”, dijo Kadri Simson, comisaria de Energía de la UE.
“La prioridad inmediata debería ser mitigar el impacto social y proteger a los hogares vulnerables, asegurando que la pobreza energética no se ve agravada”, dijo Simson a los eurodiputados. Las empresas, señaló, “pueden recibir apoyo a través de ayuda estatal o facilitando acuerdos de compra de energía a más largo plazo”.
“Estamos ante una crisis sin precedentes que requiere de medidas extraordinarias, innovadoras y contundentes”, dijo Pedro Sánchez, presidente de España, a la prensa. La UE debe “hacer una compra conjunta del gas” y revisar el sistema que fija los precios de la electricidad, que según afirmó socava el uso de energías renovables.
AUMENTO DE PRECIO Y CAÍDA DE ACCIONES
Desde Europa hasta Asia, las acciones caían y los rendimientos de los bonos del gobierno subían el miércoles, ya que los precios del petróleo alcanzaron su nivel más alto en siete años y el gas subió 25%, lo que alimentó las preocupaciones sobre el aumento de la inflación.
El índice paneuropeo Euro STOXX 600 perdía el 2%, mermando las ganancias obtenidas en su mejor día en 11 semanas el martes, con las acciones tecnológicas cayendo más del 2%. En las plazas del Viejo Continente, Alemania lideraba las pérdidas con un -2,3%. Londres perdía el 1.77%, París el 2.27% y Milán el 2.34%.
El mercado europeo de referencia, el TTF (Title Transfer Facility) holandés registró un aumento de precio del 25,14%, a 145,19 euros por megavatio-hora (MWh), y el precio del gas británico para entrega el mes que viene subía un 25,13%, a 367,78 peniques por termia (unidad de energía usada en el gas natural).
También los precios del petróleo alcanzaron su nivel más alto desde noviembre de 2014, y los inversores estaban ansiosos de que los crecientes costos de la energía pudieran obligar a los bancos centrales a subir las tasas más rápidamente para combatir el aumento de la inflación.
Las preocupaciones sobre el suministro de energía y la decisión del lunes por parte de los productores de ceñirse a un aumento de producción planificado en lugar de aumentarlo más estuvieron detrás de los incrementos.
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