El premio Nobel de Química fue otorgado este miércoles a Benjamin List y David MacMillan “por el desarrollo de la organocatálisis asimétrica”, una nueva herramienta de construcción de moléculas que ha vuelto más “verde” la química y ha mejorado la investigación farmacéutica..
El nombre de los laureados, elegidos entre decenas de nombres mantenidos en secreto, fue anunciado a las 11.50 (hora local, 9.45 GMT) en la capital de Suecia.
El alemán List y el escocés MacMillan “han desarrollado una nueva e ingeniosa herramienta para la construcción de moléculas: la organocatálisis. Sus usos incluyen la investigación de nuevos productos farmacéuticos y también ha contribuido a que la química sea más ecológica”, explicó la Academia de Ciencias.
“Los investigadores creyeron durante mucho tiempo que sólo había dos tipos de catalizadores: los metales y las enzimas. De forma independiente, los premios Nobel Benjamin List y David MacMillan desarrollaron un tercer tipo, la organocatálisis asimétrica, que se basa en pequeñas moléculas orgánicas”, añadieron.
Las autoridades científicas también destacaron que la organocatálisis se ha desarrollado a una velocidad asombrosa. “Gracias a estas reacciones, los investigadores pueden construir de forma más eficaz desde nuevos productos farmacéuticos hasta moléculas capaces de capturar la luz en las células solares”, añadieron.
“Este concepto de catálisis es tan sencillo como ingenioso, y lo cierto es que mucha gente se ha preguntado por qué no se nos ocurrió antes”, destacó Johan Åqvist, que preside el Comité Nobel de Química.
“Benjamin List y David MacMillan siguen siendo líderes en este campo y han demostrado que los catalizadores orgánicos pueden utilizarse para impulsar multitud de reacciones químicas. Gracias a estas reacciones, los investigadores pueden construir de forma más eficiente desde nuevos productos farmacéuticos hasta moléculas capaces de capturar la luz en las células solares. De este modo, los organocatalizadores están aportando el mayor beneficio a la humanidad”, indicó el comunicado de prensa.
Más de 70 candidatos
La bioquímica húngara Katalin Kariko y el inmunólogo estadounidense Drew Weismann, cuyos trabajos dieron origen a las vacunas de Pfizer/BioNTech y Moderna, tenían una segunda opción este miércoles, según expertos suecos e internacionales. Con más de mil millones de personas en el mundo vacunadas con productos que utilizan la tecnología ARNm, no hay duda sobre “su contribución al beneficio de la humanidad”, como lo exige el testamento Nobel.
Pero muchos piensan que es temprano para la usualmente prudente Asamblea Nobel, y que podría esperar a los próximos años para otorgarles el premio.
Según el organismo especializado Clarivate, que mantiene una lista actualizada de candidatos científicos al premio, más de 70 investigadores estaban entre los favoritos al laurel de química.
El año pasado, este galardón fue otorgado a la francesa Emmanuelle Charpentier y la estadounidense Jennifer Doudna, dos geneticistas que desarrollaron las “tijeras” capaces de modificar los genes humanos, un logro revolucionario.
La temporada de los Nobel continuará el jueves con el premio de literatura, la paz el viernes y economía el lunes.
Todos los Nobel siguen un proceso de elección similar: científicos, académicos o profesores universitarios nominan a sus candidatos y los distintos comités Nobel establecen varias cribas para elegir al ganador o ganadores, hasta tres por premio. Y tienen la misma dotación económica, este año de 10 millones de coronas suecas (980.000 euros, 1,1 millones de dólares).
SIN CLAROS FAVORITOS EN LITERATURA Y PREMIO DE LA PAZ
Los dos Nobel que más expectación generan cada año, el de Literatura y el de la Paz, se presentan esta vez sin favoritos claros en las quinielas previas.
Así, para el de Literatura aparecen clásicos de las especulaciones en los últimos años como el japonés Haruki Murakami, el keniano Ngugi Wa Thiongo y la guadalupeña Maryse Condé.
Entre quienes suenan a suceder a la poetisa estadounidense Louis Glück en el palmarés del premio figuran también otra lírica como la canadiense Anne Carson, su compatriota la narradora Margaret Atwood y la novelista rusa Lyudmila Ulitskaya.
Las quinielas para el Nobel de la Paz, que el año pasado premió al Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas, están dominadas por candidatos relacionados con la defensa de los periodistas, el medio ambiente y temas sanitarios.
El Comité para la Protección de los Periodistas, Reporteros sin Fronteras, la Organización Mundial de la Salud, la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático y la activista medioambiental sueca Greta Thunberg son algunos de los nombres que suenan para ganar este prestigioso premio.
SOLO EL 6% DE LOS GALARDONADOS SON MUJERES
Desde que en 1901 se falló la primera edición de los premios, los Nobel -que han quedado desiertos en 49 ocasiones- hasta 2020 han distinguido a 930 personas y 25 organizaciones, algunas varias veces, como el Comité Internacional de la Cruz Roja, el bioquímico estadounidense Linus Pauling o la científica Marie Curie.
Curie ganó el de Física en 1903, compartido con su esposo Pierre y Henri Becquerel, y el de Química en solitario en 1911, una rareza en el palmarés de los Nobel, en los que no obstante las mujeres tienen un papel marginal.
Apenas el 6% del total de premiados son mujeres (57 en total), y casi la mitad de ellas (28), han sido distinguidas en las dos últimas décadas.
En la última edición fueron cuatro las galardonadas: la estadounidense Andrea Ghez (Física), su compatriota Jennifer A. Doudna y la francesa Emmanuelle Charpentier (Química), y la también estadounidense Louise Glück (Literatura).
(Con información de AFP y EFE)
SEGUIR LEYENDO: