La negociación de las acciones del grupo chino Evergrande, una de las mayores promotoras inmobiliarias del país, con filiales en sectores como la automoción y las finanzas, fue suspendida de manera temporal este lunes en la Bolsa de Hong Kong tras la información publicada en referencia a la potencial venta del 51% de la división inmobiliaria de la compañía a la promotora china Hopson Development Holdings.
Según ha informado la agencia china Caixian News, citando a fuentes conocedoras de la situación, Hopson compraría alrededor del 51% de las acciones de Evergrande Property, adquiriendo así el control de la empresa, por unos 40.000 millones de dólares hongkoneses (5.140 millones de dólares estadounidensese).
Las acciones de Hopson también fueron suspendidas temporalmente de negociación en el parqué a la espera de comunicar una “importante transacción”.
En un comunicado remitido al mercado, la promotora informó de que la suspensión está relacionada “con una transacción importante de la empresa”, que busca adquirir una firma cotizada en la Bolsa de Valores de Hong Kong.
“Es posible que la empresa tenga que negociar con la empresa objetivo de conformidad con el Código de Adquisiciones y Fusiones de Hong Kong”, añadió Hopson.
Las acciones de la empresa de vehículos eléctricos del grupo, que la semana pasada desistió de cotizar en Shanghai, no fueron suspendidas pero cayeron 6% en el intercambio matinal.
Autoridades de la empresa han luchado con una crisis que le dejó una deuda de más de 300.000 millones de dólares, desatando temores de un contagio en la economía china que algunos creen podría extenderse a todo el mundo.
La empresa dijo la semana pasada que vendería sus acciones por 1.500 millones de dólares en un banco regional chino para recaudar capital, mientras intenta pagar los intereses a los dueños de sus bonos.
Las autoridades chinas pidieron a los gobiernos locales prepararse por un posible colapso de Evergrande, según informes de la prensa estatal, lo que sugiere que es poco probable una intervención del gobierno para rescatar al gigante inmobiliario.
La falta de liquidez generó enojo público y protestas en sus oficinas en China, con inversionistas y proveedores que reclaman su dinero.
El grupo ha admitido que enfrenta “retos sin precedentes” y advirtió que podría no lograr hacerles frente a sus compromisos.
El mercado inmobiliario chino enfrenta un estricto escrutinio los últimos meses, debido a nuevas medidas del gobierno para evitar la especulación en el sector y contener su endeudamiento.
El endeudado gigante inmobiliario chino Evergrande anunció el miércoles pasado la venta del 19,93% de las acciones del banco comercial Shengjing Bank a un conglomerado de propiedad estatal por 9.993 millones de yuanes (1.545 millones de dólares), que podría ser el primero de varios movimientos hacia firmas ligadas a Beijing.
El régimen de Xi Jinping estaba presionando a las empresas gubernamentales y a promotores inmobiliarios respaldados por el Estado como China Vanke Co Ltd para que compren algunos de los activos de Evergrande, dijeron a Reuters personas con conocimiento del asunto.
Evergrande, lastrado con 305.000 millones de dólares en pasivos, se tambalea al borde del colapso. Sin embargo, es poco probable que el gobierno central intervenga directamente para resolver la crisis en forma de rescate, según indicaron seis personas, incluidas cuatro en organismos gubernamentales y reguladores.
En su lugar, las autoridades esperan que las compras de activos eviten o al menos mitiguen cualquier malestar social que pudiera generarse si Evergrande sufre un colapso desordenado, dijeron las fuentes, negándose a ser identificadas debido a la sensibilidad del asunto.
(Con información de AFP)
SEGUIR LEYENDO: