La Unión Europea (UE) prepara más sanciones contra Bielorrusia, donde la situación sigue “deteriorándose”, a la vez que continúa con los contactos diplomáticos para frenar la entrada de migrantes desde ese país, según dijo este jueves un alto funcionario del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE).
El asunto se abordó en la comisión de Asuntos Exteriores de la Eurocámara, donde eurodiputados de distintos partidos políticos y representantes de los países más afectados por la llegada de migrantes irregulares desde Bielorrusia pasaron revista a la situación en Bielorrusia y los países europeos fronterizos, en particular Lituania, Letonia y Polonia.
“La instrumentalización de migrantes por parte del régimen de (el presidente bielorruso, Alexander) Lukashenko es una violación flagrante de normas internacionales y no ayudará a levantar las sanciones contra Bielorrusia; al contrario”, dijo Luc Devigne, alto cargo del SEAE.
Indicó en ese contexto que la UE trabajará en el quinto paquete de sanciones, un asunto que se ha empezado a preparar con los Estados miembros.
Explicó además que la UE mantiene una actividad diplomática con los países de origen de los migrantes, y en ese contexto dijo que Irak ha dado muestras de buena cooperación y que gracias a ello los flujos desde ese país se han reducido.
Los representantes de Lituania, Letonia y Polonia pidieron a la UE “unidad” en su respuesta y más sanciones contra el régimen de Lukashenko.
El viceministro de Asuntos Exteriores de Lituania, Mantas Adomenas, alertó de que “otros regímenes dictatoriales” están observando lo que ocurre en Bielorrusia y que, si la UE falla a la hora de atajar la llegada de flujos irregulares, esa misma estrategia podría ser utilizada por otros países para hacer presión sobre los Veintisiete.
En ese contexto, consideró que la “credibilidad” de la UE en el panorama internacional dependerá de su respuesta al problema.
La secretaria parlamentaria del Ministerio de Exteriores de Letonia, Kalnina Kanda, sugirió por su parte la aplicación de sanciones a personas y entidades de Bielorrusia y consideró “crucial” que la UE desarrolle una caja de herramientas para responder a la “amenaza híbrida” del régimen de Lukashenko.
“Tenemos que adaptar y extender las sanciones, por ejemplo a la empresa Belavia y a las agencias que influyen en los flujos”, dijo.
La aerolínea nacional bielorrusa Belavia ha llevado a cabo en los últimos meses vuelos con migrantes de Turquía y otros países a la capital bielorrusa, Minsk.
Mientras tanto, el presidente polaco, Andrzej Duda, firmó este jueves la declaración del estado de emergencia en las dos provincias limítrofes con Bielorrusia solicitada por el gobierno del país ante la oleada de migración irregular.
”La situación en la frontera es difícil y peligrosa y Polonia, como responsable de sus propias fronteras y también de las fronteras exteriores de la Unión Europea, ha tomado esta decisión para garantizar su seguridad y la de la UE”, declaró este jueves Blazej Spychalski, portavoz de la oficina presidencial.
Ante las críticas sobre la pertinencia de esta medida que no se adoptaba desde hace más de tres décadas, Spychalski afirmó que el presidente “tuvo que sopesar dos cosas: la seguridad del Estado por un lado y las libertades civiles por el otro”. El reglamento que instaura el estado de emergencia “es compatible con la ley” y “necesario”, añadió.
Este año ya han cruzado la frontera bielorruso-lituana más de 3.000 personas, especialmente entre junio y julio, lo que contrasta con el total de 74 personas que pasaron de un país a otro el año pasado.
Las cuatro rondas de sanciones impuestas por la UE hasta la fecha, de naturaleza económica, responden a las vulneraciones democráticas y de las libertades fundamentales por parte de ese país.
(Con información de EFE)
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