Raffaele Imperiale, considerado uno de los mayores narcotraficantes del mundo y uno de los criminales más buscados del país y que operaba por cuenta de la Camorra, la mafia napolitana, fue arrestado en una operación internacional, informó hoy la Guardia de Finanzas.
Imperiale, nacido en 1974 en Castellammare di Stabia, fue arrestado en Dubai el pasado 4 de agosto, aunque hasta hoy no se informó de la operación conjunta del Guardia de Finanzas y la Policía de Nápoles (sur) , en colaboración con el Servicio de Cooperación Policial Internacional, Interpol y Europol, coordinados por la fiscalía napolitana.
El arrestado estaba en busca y captura desde enero de 2016 por tráfico internacional de drogas y el Ministerio italiano de Justicia ya ha comenzado el procedimiento para pedir la extradición lo antes posible, indicaron las fuentes policiales en un comunicado.
La carrera criminal de Imperiale comenzó en los años 90, cuando inició su actividad como narcotraficante en Amsterdam, donde gestionaba una tienda de venta y consumo de cannabis (“coffee shop”) desde la que comenzó a sellar a alianzas con diversos carteles sudamericanos para importar drogas, especialmente cocaína, hasta los principales puntos de narcotráfico de Nápoles y su provincia, gracias también a una alianza con el clan de la Camorra Amato-Pagano.
El diario La Repubblica afirma que Imperiale había creado una red triangular de importaciones: de Holanda a Colombia, pasando por España, donde explican que se hacía llamar “Rafael Empire” y donde había abierto varios restaurantes y sociedades de inversión.
Pero después trasladó su cuartel general a Dubai y allí vivió con su familia en el Burj Al Arab, el hotel con forma de vela considerado uno de los más exclusivos del mundo.
En los últimos años la policía ha logrado efectuar numerosas detenciones e incautaciones de droga que han afectado a la organización criminal de Imperiale, como por ejemplo la de un alijo de 1.330 kilos de cocaína en París el 20 de septiembre de 2013.
Esta operación llevó al arresto de uno de sus hombres de confianza, Vincenzo Aprea, a quien se le había encomendado la tarea de supervisar la importación del narcótico procedente de Caracas en un vuelo regular de Air France.
Imperiale ya había sido detenido una vez en 2014 y la Audiencia Nacional de España había solicitado su entrega por su participación en seis operaciones de narcotráfico realizadas entre noviembre de 2012 y septiembre de 2013, pero nunca se produjo la extradición.
La policía italiana allanó en 2016 una de sus casas, en las afueras de Nápoles, y halló dos cuadros de Van Gogh robados del museo del pintor holandés en Ámsterdam, 14 años antes, en un audaz golpe. Las obras tenían un valor estimado en torno a los 130 millones de euros.
(Con información de EFE y AFP)
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