Cientos de bomberos luchaban el jueves para contener nuevos fuegos en áreas de Grecia devastadas por incendios forestales, donde las llamas han causado lo que el primer ministro describió como el “mayor desastre ecológico del país en décadas”.
Sin embargo, la lluvia durante la noche en algunas áreas y la caída de las temperaturas parecieron haber aliviado la situación después de dos semanas de devastadores incendios, y el primer ministro Kyriakos Mitsotakis dijo que “hoy podemos ser más optimistas” que los días anteriores.
La ola de calor más severa de Grecia en décadas ha avivado incendios que han destruido más de 100.000 hectáreas de bosques y tierras de cultivo, el peor daño por incendios forestales del país desde 2007, dijo el jueves el Sistema Europeo de Información sobre Incendios Forestales.
Los incendios han dejado tres muertos, cientos de personas sin hogar, han obligado a miles a huir y han causado devastación económica y ambiental.
Grecia es solo uno de varios países de la región mediterránea que se han visto afectados por una salvaje temporada de incendios que las autoridades han atribuido al cambio climático.
“La crisis climática está aquí y nos dice que todo debe cambiar”, dijo a los periodistas el primer ministro griego, señalando otros incendios devastadores en Turquía, Italia y Argelia.
El primer ministro, objeto de severas críticas por su gestión de los incendio, agregó que los bomberos, voluntarios y lugareños habían salvado “innumerables” casas y negocios, pero de todas formas se habían perdido docenas de propiedades.
Mitsotakis dijo que se han perdido 150 hogares en el área metropolitana de Atenas durante la última semana, mientras que el conteo continúa en la isla de Evia, que representa más de la mitad del área quemada en todo el país.
Cerca de Atenas
Según datos oficiales, en ocho días se contabilizaron en Grecia 586 incendios, causados por la peor ola de calor en tres décadas en un país mediterráneo acostumbrado a las altas temperaturas y a los incendios forestales en verano.
En total, del 29 de julio al 12 de agosto, 100.874 hectáreas ardieron en el país, según los cálculos efectuados por la AFP a partir de los datos suministrados por el Sistema Europeo de Información sobre Incendios Forestales (EFFIS).
En promedio, anualmente desde 2008 ardieron unas 2.750 hectáreas en este mismo periodo.
“Un santo me salvó”
Los habitantes de una veintena de pueblos han sido evacuados en los últimos días, mientras centenares de bomberos, algunos de ellos enviados por países europeos, luchan sin descanso contra las llamas.
“Estoy perdido”, comentó suspirando Kostis Angelou mientras deambulaba entre sus más de 370 cabras muertas, debido al fuego que ha devorado los bosques de Eubea.
El agricultor de 44 años logró sobrevivir pasando horas bajo una tubería de agua de riego, bajo la amenaza del fuego. “Un santo me salvó”, aseguró.
“Estamos acabados. ¿Qué podemos hacer?”, se interrogaba su padre, Spyros Angelou, de 77 años.
Los expertos vinculan esta ola de canícula al calentamiento global, tal como refleja un informe preliminar del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC) de la ONU, al que la AFP ha tenido acceso y que señala al Mediterráneo como un “punto caliente del cambio climático”.
En Argelia, se han anunciado tres días de duelo nacional a partir de este jueves por los 69 muertos en los incendios.
Por su parte, Italia también se ha visto afectada por incendios, con cinco muertos, mientras que la isla de Sicilia registró 48,8 grados el miércoles, un nuevo récord europeo, superando el anterior de Grecia.
Ocho personas murieron en incendios en el sur de Turquía a principios de mes, mientras que en el norte el número de muertos aumentó a cinco el jueves por inundaciones repentinas que se extendieron por varias regiones del Mar Negro.
(Con información de AFP)
Seguir leyendo: