La Comunidad para el Desarrollo Sudafricano (SADC, por sus siglas en inglés), anunció la llegada este domingo a la pequeña nación de Esuatini de una misión de observación para dilucidar una solución a las protestas antimonárquicas que llevan sacudiendo el país desde hace días y dejaron ya más de 40 muertos, según organizaciones.
La misión fue solicitada por el ministro de Exteriores Thuli Dladla, y aprobada con carácter de urgencia por la SADC, que denunció “extensos daños a la propiedad durante los disturbios”, aunque solo confirmaron oficialmente un fallecido, según un comunicado recogido por la ONG humanitaria Human Rights Watch (HRW).
Las protestas empezaron el 20 de junio, cuando cientos de personas salieron a las calles para pedir que el primer ministro sea elegido democráticamente y no nombrado directamente por el rey y reclamar a Mswati III, quien rige el país como una monarquía absoluta desde 1986, que ceda parte de sus competencias.
Las movilizaciones derivaron en disturbios el 28 de junio después de que el primer ministro en funciones del país, Themba Masuku, suspendiera el proceso de entrega de peticiones al Palacio Real. Durante dichas protestas se incendiaron varios comercios en Matsapha, supuestamente propiedad del monarca.
Según el director de HRW para África del Sur, Dewa Mavhinga, la situación ahora mismo es crítica. En una valoración general de la crisis, y citando declaraciones fuentes policiales a medios locales, el humanitario hizo saber en su cuenta de Twitter que “el Ejército está ahora mismo al frente y ni siquiera la Policía sabe qué están haciendo”.
“Solo llaman a la Policía para que saquen de las calles los cadáveres de personas muertas a tiros”, según las mismas fuentes sobre la actuación de los militares, que estarían siguiendo las órdenes del Palacio Real.
Además, Mavhinga denuncia que el Ejército mató a tiros a dos hombres indefensos este pasado sábado en la localidad de Lobamba, una de las dos capitales del país y sede de la monarquía. “Estaban bebiendo en un bar cuando llegaron los militares en un coche alquilado por el Gobierno y les mataron ahí mismo”, lamentado.
Para la ONG Amnistía Internacional, “el Gobierno de Esuatini ha lanzado un asalto frontal total a los Derechos Humanos en respuesta a las continuas protestas a favor de la democracia”.
“Decenas de personas han sido asesinadas por atreverse a exigir que su gobierno respete los Derechos Humanos”, lamentó por su parte Deprose Muchena, directora de Amnistía Internacional para África Oriental y Meridional
Las autoridades de Esuatini no facilitaron por ahora un balance de víctimas en las protestas, si bien el presidente del Movimiento Democrático Unido del Pueblo (PUDEMO), Mlungisi Makhanya, indicó que más de 40 personas perdieron la vida y 150 resultaron heridas, según recogió el portal de noticias Swaziland News.
REACCION DEL PAPA
El papa pidió hoy “un esfuerzo común” por el “diálogo” en Esuatini. Tras constar las “noticias de tensiones y violencia” procedentes de Esuatini, Francisco se refirió tanto a quienes “detentan la responsabilidad” de la nación africana como a “quienes manifiestan sus aspiraciones por el futuro del país”.
A todos ellos les pidió “un esfuerzo común” por “el diálogo, la reconciliación y la composición pacífica de las diversas posiciones”, al término del rezo dominical del Angelus ante decenas de fieles congregados en la plaza de San Pedro del Vaticano.
MSWATI III
Fue coronado príncipe en septiembre de 1983 y rey el 25 de abril de 1986 (a la edad de 18 años y 6 días, el rey más joven que tuvo nunca Esuatini). El rey y su madre, cuyo título es Ndlovukazi o Gran Elefanta, gobiernan juntos. Mswati III tiene actualmente 14 esposas y 35 hijos.
Las esposas son elegidas por él mismo, y cualquier mujer virgen puede aspirar a ser esposa del rey. En agosto de 2005, 50.000 mujeres desfilaron ante el rey para intentar ser elegidas.
Actualmente es el último rey absolutista de África. Gobierna por decretos y está firmemente opuesto a la democratización de su país, aunque restauró el Parlamento nacional que su padre había disuelto.
El gobierno de Mswati fue criticado por ignorar los crecientes problemas de la nación mientras él vive lujosamente, sacrificando la salud de su nación a su confort personal. Esto incluye la compra de una flota de limusinas, un jet de lujo (que costó un cuarto del presupuesto nacional), y la construcción y renovación de palacios para albergar a sus muchas esposas. Además, en el pasado restringió las libertades civiles y la libertad de expresión.
Fuertemente cristiano, prohíbe el divorcio y el uso de minifaldas. Esuatini, un país de cerca de 1,3 millones de habitantes conocido como Suazilandia hasta 2018. El monarca controla el Parlamento y nombra a los ministros, lo que generó críticas por su monopolio del poder.
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