Un agente de policía reconoció haber secuestrado y violado a Sarah Everard, la ejecutiva de marketing que desapareció cerca de Clapham Common, en Londres, el pasado 3 de marzo.
Wayne Couzens, de 48 años y nacido en la localidad de Deal (condado de Kent), fue detenido y acusado de secuestro y asesinato en marzo pasado, y se fijó un juicio para octubre. Sin embargo, este martes se declaró culpable.
En el tribunal de Old Bailey, Couzens aceptó la responsabilidad por el asesinato de Everard, pese a que no se le pidió que lo hiciera.
El acusado compareció por videoconferencia desde la cárcel de Belmarsh, donde se encuentra en prisión preventiva. Cuatro miembros de la familia de Everard se encontraban en el tribunal para escuchar los alegatos, según el medio británico The Telegraph.
Al leer el acta de acusación a Couzens, el secretario del tribunal declaró: “Se lo acusa de que el 2 de marzo de 2021, ilegalmente y por la fuerza o el fraude tomó o llevó a Sarah Everard contra su voluntad. ¿Es usted culpable o inocente?”. “Culpable, señor”, respondió Couzens con la cabeza inclinada.
Cuando se le preguntó cómo se declaraba ante el cargo de violación, Couzens volvió a responder: “Culpable, señor”.
El ex policía también está acusado de asesinar a Everard, pero la acusación no fue formulada porque aún están pendientes los informes médicos sobre su estado mental en el momento del asesinato, de acuerdo a The Telegraph.
De todas maneras, el tribunal escuchó que Couzens acepta la responsabilidad en la muerte de Everard. El próximo 9 de julio se celebrará una nueva vista judicial ante el juez Fulford.
A principios de este mes, la autopsia reveló que Everard, quien fue vista por última vez el pasado 3 de marzo, murió a consecuencia de una compresión en el cuello. Su cuerpo fue encontrado en una gran bolsa.
La mujer de 33 años fue dada por desaparecida el 4 de marzo, cuando no se presentó a un encuentro con su novio. Tras una intensa búsqueda policial, la bolsa que contenía sus restos fue encontrada en un bosque de Kent.
Couzens, quien estaba adscrito al Mando de Protección Parlamentaria y Diplomática de Scotland Yard, fue detenido en su domicilio de Kent, donde vive con su mujer y sus dos hijos.
Tras su detención, fue trasladado al hospital en dos ocasiones tras sufrir lesiones en la cabeza en su celda. No hay indicios de que nadie más esté implicado en el caso, según The Telegraph.
La muerte de Everard generó un debate nacional sobre la seguridad de las mujeres e incrementó las exigencias de más compromiso del Estado y las fuerzas de seguridad por combatir la violencia de género.
SEGUIR LEYENDO: