Malí sufrió en los últimos nueves años tres golpes de Estado orquestados por militares, el último de ellos el de anoche, cuando fueron detenidos el presidente transitorio, Bah Ndaw, y su primer ministro, Moctar Ouané.
El arresto de Ndaw y Ouané se produjo horas después de conocerse la composición del nuevo gobierno, algo que supuestamente causó el descontento de los militares tras la exclusión de dos de sus protagonistas que dirigieron el anterior golpe del pasado 18 de agosto contra el entonces presidente maliense, Ibrahim Boubacar Keita (IBK).
El golpe militar se produce en un momento delicado en Malí que vive estos días una huelga nacional convocada por la Unión Nacional de Trabajadores, la central sindical más importante del país, y padece una gran inseguridad en el norte y centro debido a la actividad yihadista.
DEPOSICIÓN DEL PRESIDENTE
El vicepresidente transitorio de Mali, coronel Assimi Goita, anunció hoy que destituyó a su superior, el presidente Bah Ndaw, así como al primer ministro Moctar Ouané, antes de asegurar que “el proceso de transición sigue su curso normal” y que habrá elecciones en 2022.
En un comunicado emitido hoy en Bamako y leído en la televisión nacional, Goita, que encabezó el anterior golpe de estado en agosto de 2020, no precisó cómo queda ahora la jefatura del Estado, aunque quiso dar una sensación de normalidad al invitar al pueblo maliense a “continuar libremente con sus ocupaciones”.
Goita insistió en “el compromiso indefectible” de las fuerzas armadas malienses para defender la seguridad del país, pero no ofreció detalles sobre el paradero de los detenidos ni los planes inmediatos de los golpistas.
Tras varias horas desde la detención de Ndaw y Ouané, el comunicado del vicepresidente Goita explica que las razones de esa acción se explican por una “crisis de muchos meses a nivel nacional”, en alusión a las huelgas y diversas manifestaciones convocadas en el país por actores sociales y políticos.
El arresto de Ndaw y Ouané se produjo horas después de que se diese a conocer la composición del nuevo gobierno formado por el primer ministro, que según varias fuentes causó malestar entre los militares golpistas por la exclusión de dos mandos militares.
GOLPE DE 2020
Los militares que tomaron ayer del poder son los mismos que derrocaron el 18 de agosto de 2020 al presidente Boubacar Keita, disolvieron el Parlamento, y crearon un “Comité Nacional para la Salvación del Pueblo” para dirigir un proceso transitorio que aún no había concluido.
Ese golpe militar, dirigido por los coroneles Sadiou Camara y Malick Diaw, se produjo sin el menor derramamiento de sangre, pues rápidamente el grueso de las fuerzas armadas se puso del lado de los golpistas y también la población pareció acogerlo favorablemente, pues puso fin a varios meses de imponentes manifestaciones antigubernamentales.
2012, GOLPE Y GUERRA
El 22 de marzo de 2012, una unidad militar dirigida por el capitán Amadou Sanogo atacó el palacio presidencial en Bamako provocando el derrocamiento del entonces presidente Amadou Toumani Touré, y después de un año de transición el país recuperó su orden constitucional.
Aquel golpe desencadenó además una proclamación de secesión del Azawad (el tercio noreste del país) por parte de los movimientos tuaregs; en ese estado no reconocido aparecieron entonces varios grupos de inspiración yihadista que plantearon una guerra sin cuartel contra el Estado y que todavía hoy siguen muy activos.
(Con información de EFE)
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