Alexei Navalny lleva 19 días en huelga de hambre y su salud se deteriora rápidamente: la oposición rusa convocó a una nueva protesta para exigir su libertad

La manifestación se realizará el próximo miércoles 21 de abril, fecha en la que Vladimir Putin tiene previsto dar su discurso anual sobre el estado de la nación. Los gobiernos de Estados Unidos y Francia advirtieron por el deterioro de las condiciones del activista

Guardar
Protestas por el arresto de
Protestas por el arresto de Navalny, en Moscú (Reuters)

La oposición rusa anunció este domingo protestas en varias ciudades rusas para el 21 de abril en apoyo al principal rival de Vladimir Putin, Alexei Navalny, en huelga de hambre en prisión desde hace 19 días, lo que generó que líderes mundiales expresen preocupación por su estado de salud.

“Los acontecimientos se desarrollan de una forma muy rápida y muy desfavorable”, dijeron los aliados de Navalny Iván Zhdanov y Leonid Volkov en un video publicado en la web del opositor. “Ya no se trata solamente de la libertad de Navalny, sino de su vida. En este momento, lo están matando en una colonia penitenciaria y no podemos esperar más”, escribió Volkov en Facebook.

Señaló además que la manifestación del miércoles podría convertirse en una batalla decisiva en la lucha contra el “mal absoluto”, o el último mitin de la oposición de Rusia durante años.

Alexei Navalny (Reuters)
Alexei Navalny (Reuters)

A finales de marzo el equipo de Navalny lanzó una campaña en la red para reunir a 500.000 personas dispuestas a salir a la calle para exigir la liberación del político. A día de hoy la convocatoria ya ha sido apoyada por más de 450.000 ciudadanos.

Esta convocatoria se hizo pública tras que los médicos de Navalny afirmaran el sábado que la salud del político opositor se había deteriorado rápidamente, y que “en cuanquier momento” podría sufrir un paro cardíaco. Zhdanov y Volkov afirmaron en su video que “existen circunstancias en las que hay que actuar rápido para no permitir que ocurra algo irreversible”. Según los colaboradores de Navalny, la vida del opositor “pende de un hilo”, porque tiene graves problemas de salud y no puede ver a su médico de confianza.

La fecha de la convocatoria coincide con el día en el que el presidente ruso, Vladímir Putin, tiene previsto dirigirse a la Asamblea Federal con su discurso anual sobre el estado de la nación.

Protestas en enero tras el
Protestas en enero tras el arresto de Navalny, en San Petersburgo (Reuters)

Bajo la mirada del mundo

El presidente estadounidense, Joe Biden, dijo el sábado que es “totalmente injusta” la situación de Navalny. Desde su ciudad natal de Wilmington (Delaware), donde está pasando el fin de semana, Biden aludió al “envenenamiento y luego a la huelga de hambre” del activista en su respuesta a los reporteros que le consultaron por el tema. En tanto, el asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, advirtió que Rusia enfrentará “consecuencias” si el crítico del Kremlin muere en prisión.

Por su parte, el ministro francés de Relaciones Exteriores, Jean-Yves Le Drian, dijo que el gobierno galo está “extremadamente preocupado” por el estado de salud del opositor. “La situación de Navalni es muy preocupante. Aspiro a que se tomen medidas para garantizar la integridad física de Navalni, pero también su liberación. En esto hay una enorme responsabilidad del presidente Putin”, indicó el jefe de la diplomacia francesa ante cámaras de la cadena de televisión pública France 3.

Los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea (UE) analizarán el lunes el caso, anunció este el ministro alemán Heiko Mass. Además, pidió a las autoridades rusas que aporten “urgentemente” una “atención médica adecuada” al opositor, dada la “muy preocupante” degradación de su salud, en declaraciones al diario Bild, exigiendo que “tenga acceso a médicos de su confianza”.

Además, más de 70 escritores, artistas y académicos, incluidos Jude Law, Vanessa Redgrave y Benedict Cumberbatch han pedido a Putin que se asegure de que Navalni recibe tratamiento adecuado, mediante una carta pública que apareció en el diario francés Le Monde.

El 31 de marzo, el opositor más destacado de Putin se declaró en huelga de hambre, exigiendo un tratamiento médico adecuado para su dolor de espalda y el entumecimiento de sus piernas y manos.

Navalny, de 44 años, se declaró en huelga de hambre el 31 de marzo pasado en protesta por la negativa de los servicios penitenciarios a ser examinado por un médico de confianza. A su vez, las autoridades de la cárcel de la región de Vladimir, donde el líder opositor cumple una condena de dos años y medio, informaron de que los exámenes médicos a los que fue sometido Navalny a principios de abril demostraron que el estado del reo es satisfactorio.

(Con información de EFE y AFP)

SEGUIR LEYENDO:

Guardar