La junta militar birmana ha anunciado un alto el fuego unilateral de un mes con los grupos étnicos armados. La declaración llega después de que al menos 20 soldados murieran en un enfrentamiento con el Ejército Independiente Kachin, una de las guerrillas étnicas más potentes del país.
Según informó este jueves en Twitter Ko Bo Yi, secretario adjunto de la Asociación para la Asistencia de Presos Políticos (AAPP), el alto el fuego declarado en la tarde del miércoles solo afecta a los grupos armados, pero no a los manifestantes que protestan desde hace dos meses en las calles de todo el país.
“Todavía están matando y torturando a la población desarmada”, denunció Bo Yi en referencia a la junta militar, que en su alto el fuego exceptúa las acciones que afecten a la seguridad del gobierno y a sus operaciones administrativas.
Según informó este jueves el portal birmano DVB News, el alto al fuego llegó luego de que la guerrilla abriera fuego contra un convoy militar en la localidad de Mohnyin, en el estado de Kachin, en la tarde del miércoles y dañara no solo a cuatro vehículos del Ejército, sino que además causara la muerte a 20 soldados.
Los manifestantes, a pesar de la represión a la que son sometidos, no planean dar por finalizadas las protestas. Este jueves miles de personas volvierán a salir a la calle, donde planean quemar la Constitución de 2008, declarada nula anoche por el llamado gobierno civil de Myanmar, formado por las personas que realizaron el golpe de estado del 1 de febrero de este año.
Esta decisión de la junta militar llega días después de que el gobierno de Tailandia decidiera expulsar a los refugiados birmanos que escapaban de los horrores de la junta. Más de 3.000 birmanos, entre los que se encontraban más de 1.100 menores de edad, fueron obligados a cruzar la frontera hacia Tailandia luego de que la guerrilla llevara a cabo varios bombardeos conjuntos en las ciudades cercanas a la frontera.