Estados Unidos reafirmó este miércoles que Hong Kong ha perdido su autonomía respecto a China y prometió aumentar la presión sobre Beijing por desmantelar el estatus especial de la ciudad-estado.
Un día después de que China aprobara una revisión radical del sistema político de Hong Kong, que pulverizó los pocos resabios democráticos que quedaban, el Secretario de Estado consideró en un informe obligatorio para el Congreso que el centro financiero “no justifica un trato diferente al de la China continental según la legislación estadounidense”.
Las acciones de Beijing en el último año “han socavado gravemente los derechos y las libertades de los habitantes de Hong Kong”, dijo Antony Blinken en un comunicado.
De esta manera, el gobierno de Joe Biden ratifica una decisión del ex presidente Donald Trump, que despojó a Hong Kong de los privilegios separados que disfrutaba con Estados Unidos desde su traspaso del Reino Unido a China en 1997, incluyendo la suspensión de un tratado de extradición.
“Me comprometo a seguir trabajando con el Congreso y con nuestros aliados y socios de todo el mundo para apoyar a la gente de Hong Kong contra las atroces políticas y acciones de la República Popular China”, dijo Blinken.
“Impondremos consecuencias por estas acciones”, afirmó el jefe de la diplomacia estadounidense, aludiendo a las sanciones establecidas contra funcionarios chinos y de Hong Kong.
Beijing pasó por alto al poder legislativo de Hong Kong e impuso el martes nuevas medidas que incluyen la posibilidad de escrutar a cualquier persona que se presente a un cargo público —y decidir si está en condiciones o no según los criterios del régimen— y la reducción del número de políticos elegidos directamente.
Fue la última medida de China, que incluye una dura ley de seguridad, considerada como un intento de sofocar una campaña por la democracia que en 2019 se plasmó en protestas masivas. Los líderes chinos prometieron permitir a Hong Kong un sistema separado antes de la entrega del Reino Unido, un acuerdo que Estados Unidos y otras naciones occidentales dicen que se ha violado.
El fin del estatus especial
Estados Unidos revocó el 30 de junio pasado el “estatus especial” de Hong Kong ante el riesgo de que se desvíe tecnología estadounidense “sensible” a las autoridades chinas. “Las regulaciones del Departamento de Comercio permitiendo un trato preferencial a Hong Kong sobre China, incluyendo la disponibilidad de excepciones a las licencias de exportación, se suspenden”, había anunciado el entonces secretario de Comercio norteamericano, Wilbur Ross.
Esta medida se produjo mientras se debatía en el Comité Permanente de la Asamblea Nacional Popular china (ANP, Legislativo) la aprobación de la polémica ley de seguridad nacional para Hong Kong, último paso para su entrada en vigor, en vísperas de que la ciudad conmemorara los 23 años de su vuelta a la soberanía china.
Ross explicó que “con la imposición por parte del Partido Comunista de China de nuevas medidas de seguridad en Hong Kong, el riesgo de que tecnología sensible de EEUU sea desviada al Ejército de Liberación Popular o el Ministerio de Seguridad del Estado (chino) ha aumentado, todo ello socavando la autonomía del territorio”.
“Estos son riesgos que EEUU rechaza aceptar y han resultado en la revocación del estatus especial de Hong Kong”, concluyó quien se desempeñaba como secretario de Comercio en el gobierno de Donald Trump.
Con información de AFP
SEGUIR LEYENDO: