China amenazó el lunes con un “contraataque” contra una medida de Estados Unidos para levantar las restricciones a los contactos oficiales con Taiwán a medida que aumentan las tensiones militares entre Beijing y la isla autogobernada.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, dijo el sábado que Washington levantaría “restricciones internas complejas” sobre los contactos con Taipei por parte de diplomáticos, después de un año de creciente fricción entre Estados Unidos y China sobre temas como los derechos humanos, el comercio y los orígenes de la pandemia de covid-19.
El régimen chino dice que Taiwán es una parte inviolable de China que debe ser reclamada, por la fuerza si es necesario, y se opone a cualquier reconocimiento diplomático de la isla democrática.
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Zhao Lijian, dijo que Beijing “condena enérgicamente” la medida y acusó a Estados Unidos de violar los términos de las relaciones diplomáticas de Washington con Beijing.
“Cualquier acción que dañe los intereses centrales de China recibirá un resuelto contraataque de China”, advirtió Zhao, instando a Pompeo a retractarse de la decisión o enfrentarse a un “severo castigo”.
No estaba claro qué significa el cambio en la práctica, y Pompeo dijo que las comunicaciones del poder ejecutivo con Taiwán serán manejadas por el Instituto Americano en Taiwán (AIT), que es propiedad del gobierno de Estados Unidos y sirve como la embajada de facto.
La AIT fue fundada en 1979, cuando Estados Unidos extendió el reconocimiento diplomático a China continental en virtud de un acuerdo histórico que le exigía poner fin al reconocimiento formal de Taiwán.
Pero Washington sigue siendo un firme aliado de Taipei y está obligado por el Congreso a venderle armas para la autodefensa. Se opone a cualquier movimiento para cambiar el estado actual de Taiwán por la fuerza.
Las tensiones militares entre China continental y Taiwán se han agudizado el año pasado, llegando a su peor nivel desde mediados de la década de 1990, dicen algunos analistas.
Los aviones chinos realizaron un récord de 380 incursiones en la zona de defensa de Taiwán el año pasado, dijo un oficial militar el martes.
La animosidad de Beijing ha aumentado drásticamente desde que Tsai Ing-wen ganó las elecciones como presidenta de Taiwán en 2016; rechaza la insistencia de Beijing de que la isla es parte de “una sola China”.
(Con información de AFP)
Seguir leyendo: