Francia detectó por primera vez la presencia de covid-19 en un criadero de visones en Eure-et-Loir (centro), según informaron este domingo conjuntamente los ministerios de Agricultura, de Salud y de la Transición ecológica.
“Ha sido ordenado el sacrificio de los 1.000 animales que aún quedan en la granja y la eliminación de los productos procedentes de éstos”, afirma el comunicado.
Además del sacrificio de los animales se destruyeron todos los productos de visón almacenados en las instalaciones.
Las autoridades también han realizado análisis sobre los cuatro trabajadores de la granja afectada.
Sobre los cuatro criaderos de visones existentes en el país, uno permanece indemne respecto a la situación y “en los otros dos todavía se están realizando análisis”, cuyos resultados son esperados en el correr de la semana próxima.
Los ministerios franceses de Agricultura y Sanidad lanzaron un programa de análisis de las granjas de visones después de que se encontrara coronavirus en este tipo de animales en cautividad en otros países europeos, especialmente en Dinamarca, donde se ordenó el sacrificio de casi quince millones de animales.
El comunicado añadió que también se ha detectado coronavirus en visones de granja en Países Bajos, Suecia y Grecia, así como en casos aislados en Italia y España, además de en Estados Unidos.
La semana pasada las autoridades de Dinamarca concluyeron que la potencial amenaza sobre la mutación del coronavirus detectada en los visones de criadero está “muy probablemente erradicada”. Informaron que no detectan casos nuevos desde el pasado 15 de septiembre y, en consecuencia, las estrictas restricciones impuestas a los 280.000 habitantes de las siete comunas de Jutlandia del norte fueron levantadas el viernes.
El país escandinavo ya ha sacrificado a más de dos tercios de sus 15 millones de visones para evitar la posibilidad de que los animales propaguen la enfermedad a los humanos, y mantiene la intención de eliminarlos a todos para evitar cualquier otra mutación riesgosa.
Si bien el problema del “Cluster 5” no fue identificado hasta principios de noviembre, los contagios de esta cepa en visones y los doce casos en humanos se remontan a agosto y septiembre, por lo cual las autoridades consideran que su transmisión podría haber desaparecido por sí sola.
Dinamarca es el mayor exportador mundial de visones y el segundo mayor criador por detrás de China, con una facturación anual de casi USD 800 millones.
“Esta variante, llamada variante ‘cluster 5’, presenta una combinación de mutaciones o cambios que no habían sido observados previamente”, aseguró la semana pasada la Organización Mundial de la Salud (OMS), y subrayó que “las implicaciones de los cambios identificados en esta variante no han sido aún bien comprendidas”.
Los resultados preliminares, dijo la OMS, indican que esta variante particular asociada al visón presenta una “sensibilidad moderadamente reducida a los anticuerpos neutralizantes”. “Aunque se piensa que el virus está ancestralmente asociado a los murciélagos, el origen del virus y el o los transmisores intermediarios del SARS-CoV-2 no han sido aún identificados”.
Con información de AFP y EFE
Seguir leyendo: