Estados Unidos, Francia y Rusia instaron este martes a Armenia y Azerbaiyán a que cumplan de inmediato con el alto el fuego en Nagorno Karabaj, anunciado el pasado sábado pero incumplido por cuarto día consecutivo.
“Llamamos a las partes a implementar inmediatamente el cese el fuego humanitario y permitir la recuperación de los cadáveres y el retorno de prisioneros de guerra y detenidos”, señalaron en un comunicado los países, copresidentes del Grupo de Minsk de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE).
Aunque desde el inicio de la tregua los combates no son tan cruentos y los bombardeos aéreos menos frecuentes, especialmente en la capital karabají, Stepanakert, las hostilidades continúan tanto en el frente como en la retaguardia.
De hecho, los mediadores levantaron la voz de alarma por “la continua violencia” en todo el territorio, cuya soberanía se disputan armenios y azeríes desde 1988.
En esta línea, los mediadores pidieron a los mandatarios de ambos países, el presidente azerí Ilham Alíev y el primer ministro armenio Nikol Pashinián que den “pasos inmediatos” para cumplir plenamente las obligaciones contraídas por las partes en la Declaración de Moscú del 10 de octubre para “evitar consecuencias catastróficas para la región”.
En línea con lo acordado en Moscú, los mediadores están trabajando con ambos países para alcanzar una “solución negociada” al conflicto.
El comunicado fue emitido después de las conversaciones mantenidas por los tres representantes del Grupo de Minsk con los ministros de Exteriores armenio, Zohrab Mnatskanián, y azerí, Jeihun Bayrámov.
Occidente se involucra
Ante el cariz que toman los acontecimientos en la región, el secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, se dirigió a ambos países en conflicto para que cesen las hostilidades y dejen de golpear “áreas civiles” como Stepanakert y Ganja, la segunda ciudad azerí donde diez civiles murieron el domingo en un ataque con misiles.
“Deploramos la pérdida de vidas humanas y seguimos comprometidos con un arreglo pacífico”, dijo en Twitter.
Por su parte, el alto representante de la UE para la Política Exterior, Josep Borrell, se comunicó por teléfono con su colega ruso, Serguéi Lavrov, al que agradeció sus esfuerzos de mediación que llevaron al cese del fuego tras dos semanas de combates y cientos de muertos.
Borrell pidió tanto el fin de las hostilidades como de las tensiones y de la retórica belicista, y destacó que el saldo de pérdidas humanas por ambas partes es “inaceptable”. Recordó que en sus contactos con Bakú y Ereván ha pedido a ambas partes que reanuden “urgentemente” las negociaciones “sin precondiciones”. “La UE está dispuesta a contribuir a esos esfuerzos”, apuntó.
Rusia y Turquía discrepan
En paralelo a las negociaciones, Rusia expresó a Turquía su preocupación por el despliegue de mercenarios y terroristas de Medio Oriente en el frente del Karabaj.
Moscú recordó a Ankara que su cartera está participando activamente en los esfuerzos para una “pronta estabilización de la situación en Nagorno Karabaj”.
En respuesta, el ministro de Exteriores turco, Mevlüt Çavusoglu, criticó el hecho de que los copresidentes del Grupo de Minsk no hayan dado “hasta hoy ningún paso concreto para resolver el problema”.
Por ello, propuso una reunión del grupo de mediadores, a los que exigió un informe sobre lo que han hecho hasta ahora y los pasos que se deben dar a partir de ahora. “Hemos dicho muchísimas veces que la única manera de resolver este problema es que Armenia se retire del territorio de Azerbaiyán, y lo decimos hoy de nuevo”, afirmó.
Mientras los azeríes nunca informan de bajas militares, el Karabaj cifró hoy en 542 los caídos en el frente, cuando antes de la tregua ascendían a 404.
En una demostración de que los karabajíes se preparan para un recrudecimiento de los combates, su líder, Araik Arutiunián, informó de la aprobación urgente de dos leyes que regulan la participación de “milicias populares” en la guerra y la intervención de una “potencia mundial” en defensa del enclave.
“Turquía y miles de terroristas a sueldo toman parte en la guerra. En este momento crítico de la Guerra Patria Santa llamo una vez más a nuestro pueblo a unirse (...) La participación individual es posible para romper el espinazo de nuestro enemigo y expulsarlo de nuestras fronteras”, proclamó.
Por Pablo González (EFE)
Seguir leyendo: