La detención del activista Joshua Wong, ocurrida este jueves en Hong Kong, mina la confianza de la UE en China y podrá tener consecuencias en la relación bilateral, apuntó el jueves la oficina de Josep Borrell, jefe de la diplomacia europea.
“La evolución de la situación en Hong Kong cuestiona la voluntad de China de respetar los compromisos internacionales, mina la confianza y tiene repercusiones en las relaciones entre la UE y China”, señaló la oficina de Borrell en una nota oficial.
Wong, de 23 años, es una de las figuras más influyentes del movimiento estudiantil que encabezó la importantes manifestaciones en Hong Kong contra la creciente influencia de las autoridades chinas en ese territorio semiautónomo.
El abogado de Wong anunció el jueves que el joven activista había sido detenido por “reunión ilegal” durante una manifestación celebrada en octubre de 2019.
Según el abogado, Wong fue detenido al presentarse en una comisaría, donde tiene obligación de acudir periódicamente por otro asunto judicial en curso.
En su nota oficial de este jueves, la UE señaló que “un sistema judicial independiente, que opere libre de influencia o consideración política, es una piedra fundamental de la autonomía de Hong Kong bajo el principio de un país, dos sistemas”, que rige las relaciones con China.
Para la UE, la detención de Wong se suma a las otros activistas desde el verano boreal, y deberían ser objeto de un “cuidadoso análisis por parte del poder judicial”.
Este arresto coincide con un aumento del control de China sobre Hong Kong desde el pasado junio, gracias fundamentalmente a una ley sobre seguridad nacional que es vista como una respuesta a la crisis política de 2019.
(Con información de AFP)
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