Michel Aoun, presidente del Líbano, pidió la proclamación de un “Estado laico” y abandonar el sectarismo

El mandatario llamó a un diálogo “que incluya a todas las autoridades políticas y religiosas para llegar a una fórmula aceptable para todos”

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Michel Aoun, presidente del Líbano (Dalati Nohra/Handout via REUTERS)
Michel Aoun, presidente del Líbano (Dalati Nohra/Handout via REUTERS)

El presidente del Líbano, Michel Aoun, pidió este domingo la proclamación de un “Estado laico” durante un discurso televisado con motivo del próximo centenario del Estado libanés. El mandatario exigió ese cambio como solución a la “crisis sin precedentes” que atraviesa el país, y para así abandonar el sectarismo después de la explosión que sacudió el país el pasado 4 de agosto.

“Llamo a que el Líbano sea declarado un Estado laico, al diálogo que incluya a todas las autoridades políticas y religiosas para llegar a una fórmula aceptable para todos”, señaló en un breve discurso.

“El 1 de septiembre de 2020 es una continuación del 1 de septiembre de 1920. Y es por eso que creo que un Estado laico protege y preserva el pluralismo”, agregó.

“La juventud del Líbano está pidiendo un cambio... para ellos y para su futuro”, sostuvo el presidente de 85 años, quien ha sido acusado por los manifestantes de estar fuera de contacto con la juventud del país.

Miembros del parlamento libanés asistieron a una sesión legislativa en el Palacio de la UNESCO en Beirut para permitir el distanciamiento social en medio de la propagación del coronavirus (REUTERS/Mohamed Azakir)
Miembros del parlamento libanés asistieron a una sesión legislativa en el Palacio de la UNESCO en Beirut para permitir el distanciamiento social en medio de la propagación del coronavirus (REUTERS/Mohamed Azakir)

“Digo que sí, ha llegado el momento (...) Hay una necesidad de desarrollar, modificar, cambiar el sistema”, apuntó.

El próximo 1 de septiembre se cumple el centenario del establecimiento del Estado del Gran Líbano, que fue proclamado por Francia en una división con Gran Bretaña después de la I Guerra Mundial, un paso que fue bienvenido por los cristianos maronitas, la comunidad a la que pertenece Aoun, aunque no por los musulmanes.

El Líbano vivió una guerra civil que duró de 1975 a 1990 y que terminó con un acuerdo de reparto de poder en el Gobierno entre las 18 comunidades religiosas presentes en el país.

Desde entonces, esta repartición de asientos en el Parlamento ha dificultado la formación de gobiernos y la toma de decisión a la hora de llegar a acuerdos.

“El sistema sectario que se basa en los derechos de las comunidades y las cuotas entre ellas han sido válidos por un tiempo, pero hoy se ha convertido en un obstáculo para cualquier desarrollo en el país, un obstáculo para cualquier reforma y la lucha contra la corrupción, así como un generador de conflicto y división para todo el mundo que quiere golpear al país”, aseveró el presidente.

Miles de manifestantes se movilizaron en Beirut tras la explosión del 4 de agosto para denunciar la corrupción del país y pedir la renuncia del Ejecutivo (REUTERS/Alkis Konstantinidis)
Miles de manifestantes se movilizaron en Beirut tras la explosión del 4 de agosto para denunciar la corrupción del país y pedir la renuncia del Ejecutivo (REUTERS/Alkis Konstantinidis)

El Líbano hace frente a una de sus peores crisis de la historia, una situación que se ha agravado tras la explosión el pasado 4 de agosto de casi 3.000 toneladas de nitrato de amonio almacenados seis años sin custodiar en el puerto de Beirut, que mató a 190 personas, hirió a más de 6.500, dejó sin hogar a unas 300.000 y asoló gran parte de la capital mediterránea.

Está previsto que mañana lunes comiencen las consultas parlamentarias para nombrar a un nuevo primer ministro después de que el anterior gabinete dimitiera en bloque seis días después de la explosión.

También se espera que mañana por la noche llegue a Beirut el presidente francés, Emmanuel Macron, por segunda vez en menos de un mes y comience su programa oficial el 1 de septiembre.

Líbano atraviesa su peor crisis post-guerra tras la explosión del 4 de agosto (REUTERS/Hannah McKay)
Líbano atraviesa su peor crisis post-guerra tras la explosión del 4 de agosto (REUTERS/Hannah McKay)

Hassan Nasrallah, jefe del grupo terrorista Hezbollah, aliado del Movimiento Patriótico Libre de Aoun, dijo antes el domingo que su movimiento chiíta estaba “abierto” a la propuesta francesa de un nuevo pacto político para el Líbano mientras haya consenso nacional.

Aoun recibirá el lunes a los representantes de los bloques parlamentarios y a los legisladores independientes para iniciar las consultas para nombrar un nuevo primer ministro después de que el gobierno dimitiera tras la explosión de Beirut.

Con información de AFP y EFE

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