Prisionera del coronavirus: la niña que sigue dando positivo a pesar de llevar cuatro meses sin síntomas

Forza, de 4 años, está encerrado y ahora corre el riesgo de no poder inscribirse en el jardín de infantes. No contagió a ninguno de sus parientes, no tiene manifestaciones de la enfermedad y desarrolló anticuerpos. Pero la ley requiere un doble hisopado negativo para que sea declarada curada y pueda salir

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Una mujer y su hija de dos años en su casa en San Fiorano en los primeros días de cuarentena en febrero de 2020 (Marzio Toniolo via REUTERS/Foto de archivo)
Una mujer y su hija de dos años en su casa en San Fiorano en los primeros días de cuarentena en febrero de 2020 (Marzio Toniolo via REUTERS/Foto de archivo)

Prisionera del coronavirus desde hace cuatro meses: una niña italiana de cuatro años que sigue dando positivo al hisopado no puede salir de su casa, corre el riesgo de no poder inscribirse al jardín de infantes y sufre pesadillas, denunció este martes su madre a medios locales.

“Se necesita un hisopado doblemente negativo para liberar a mi hija de manera legal pero ya no quiero someterla a este estrés. La atormentan las pesadillas, se despierta gritando, habla de monstruos y malos médicos”, contó la mujer al diario Il Corriere della Sera.

La madre de la niña explicó cuán terrible es la situación en la que ha sido forzada su hija en los últimos 120 días. La mujer pidió permanecer en el anonimato para proteger a la niña, que llamó Forza (Fuerza), “porque esto es exactamente lo que mi pequeña ha demostrado ser”.

La niña, que vive con su familia en la periferia de Milán, tuvo los primeros síntomas de Covid-19 en marzo, hace 4 meses. En esos mismos días otros miembros de la familia habían mostrado síntomas compatibles con el virus. Pero como no eran graves, ninguno fue hospitalizado o sometido a hisopado. Para no correr riesgos, sin embargo, decidieron permanecer en cuarentena durante más de los 14 días mínimos requeridos.

Hasta que el 14 de mayo aparecieron manchas en las manos de la niña. “Tenía miedo, en esos días se hablaba del síndrome de Kawasaki relacionado con Covid en niños”, dijo la madre. Forza fue llevada al hospital y el hisopado resultó débilmente positivo. Las pruebas también mostraron que la niña había desarrollado una gran cantidad de anticuerpos contra el Covid-19.

Después de esa primera prueba, se le realizaron otras cuatro en un mes. “Todas dieron resultados contradictorios: débil, negativa, positiva”, dijo la madre. El procedimiento, además, era especialmente invasivo para una niña tan pequeña: tenía que ser inmovilizada para que los hisopos de algodón le fueran insertados en la nariz y la boca en busca del virus.

Una niña en su casa durante la cuarentena dictada en New Rochelle, Estados Unidos, en marzo (REUTERS/Joy Malone)
Una niña en su casa durante la cuarentena dictada en New Rochelle, Estados Unidos, en marzo (REUTERS/Joy Malone)

Al poco tiempo, Forza comenzó a mostrar alteraciones del comportamiento: no querían ser tocada ni subirse al auto. Así la madre decidió no someterla más a las pruebas y recurrió a las autoridades regionales competentes (que ya han destacado el problema ante el Ministerio de Salud) y a las nacionales. Según las reglas, se necesitan dos tests negativos después de 24 horas para que se pueda dar por terminada la cuarentena obligatoria. Pero para la pequeña, ese doble hisopado negativo nunca llegó.

Las autoridades de salud, contactadas varias veces por la madre, están de acuerdo con ella en que la niña ya no es un peligro para los demás. No obstante, nadie se hace cargo de su situación. “Todos me han confirmado que la niña ya no es contagiosa, pero nadie asumió la responsabilidad de liberarla”, dijo la madre al Corriere.

Pese a la falta de hisopado negativo, ahora Forza comenzó a salir de nuevo y lleva una vida casi normal. Las autoridades fueron informadas y no tuvieron objeciones. Sin embargo, el problema volverá a presentarse dentro de poco, cuando la niña tenga que ir al jardín de infantes y su condición de positiva al Covid-19 podría causarle problemas para inscribirse, ya que todavía no hay reglas claras con respecto a los débilmente positivos. “Pido que se evalúen otros elementos para el fin de la cuarentena”, concluyó la madre. “Los niños no pueden ser sometidos a semejante violencia”.

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