El líder norcoreano Kim Jong-un organizó una reunión militar para discutir nuevas políticas para reforzar las capacidades nucleares del país, informó el domingo la agencia estatal KCNA.
“En la reunión se presentaron nuevas políticas para aumentar aún más la disuasión nuclear del país y poner a las fuerzas armadas estratégicas en una operación de alerta máxima”, informó KCNA.
El líder norcoreano habló durante la Cuarta Reunión Ampliada de la Séptima Comisión Militar del Partido de los Trabajadores de Corea (WPK, por sus siglas en inglés).
Las discusiones también se centraron en “poner a las fuerzas armadas estratégicas en una operación de alerta alta” en línea con la “construcción y el desarrollo de las fuerzas armadas del país”. También se acordaron medidas “para aumentar decisivamente la capacidad de golpe con fuego de artillería” del Ejército norcoreano, agrega la información, que también da cuenta de que en la reunión se acordaron ascensos no detallados en la jefatura militar.
Se cree que la reunión ocurrió en los últimos días, aunque no fue confirmada la fecha de su realización. Así, sería la primera aparición pública de Kim en casi tres semanas, según la agencia de noticias surcoreana Yonhap.
En abril surgieron rumores sobre la salud de Kim después de que estuviera ausente de una celebración de mediados de mes por el cumpleaños de su abuelo, solo para aparecer semanas después en la apertura de una fábrica de fertilizantes.
Esta reunión se llevó a cabo en medio de un nuevo estancamiento en los contactos entre Washington y Pionyang para lograr la desnuclearización de la península coreana.
A eso se suma que el viernes, The Washington Post confirmó que la administración del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, había discutido la celebración de la primera prueba nuclear de los Estados Unidos desde 1992 como una posible advertencia para Rusia y China.
Daryl Kimball, director ejecutivo de la Asociación de Control de Armas con sede en Estados Unidos, dijo al periódico que tal decisión probablemente “interrumpiría” las negociaciones con Kim, “que tal vez ya no se sienta obligado a honrar su moratoria en las pruebas nucleares”.
A finales de 2019, Kim anunció que develaría pronto “una nueva arma estratégica” y que su país continuaría con el desarrollo de armas nucleares, luego de que venciera el plazo impuesto por Pyongyang para que Estados Unidos flexibilizara las sanciones sobre el hermético país comunista a cambio de avances en la desnuclearización de la península coreana.
Con información de AFP y FEE
MÁS SOBRE ESTE TEMA: