China de a poco empieza a retomar la normalidad tras haber alcanzado el pico de contagios y muertes por coronavirus. Sin embargo, las autoridades permanecen en alerta. Por ese motivo, el gigante asiático cerró la ciudad de Suifenhe, fronteriza con Rusia, tras el incremento de “casos importados” de COVID-19.
Tras un acuerdo con Moscú, el país cerró los más de 4.400 kilómetros de frontera con Rusia, luego de que ayer se registraran 40 nuevos casos de coronavirus en esa región. Se trata del mayor índice reportado hasta el momento, que eleva el total de “casos importados” a 127, de acuerdo a las autoridades sanitarias locales.
La ciudad portuaria china, de 70.000 habitantes, fue cerrada el miércoles a las 6 de la madrugada, el mismo día que Wuhan, epicentro del brote, levantó la estricta cuarentena después de 76 días.
Un video muestra a trabajadores sanitarios, con trajes de protección, en fila con oficiales de policía vigilando la frontera entre China y Rusia.
La ciudad de Suifenhe es una de las tres ciudades fronterizas de la provincia de Heilongjiang, en el noreste de China.
El puerto de la ciudad, que limita con Pogranichny, en la región sudoriental de Primorsky Krai, en Rusia, está cerrado al tráfico de peatones y vehículos, al igual que las grandes ciudades fronterizas de Heihe y Fuyuan. Lo mismo ocurrió en la región autónoma del norte de Mongolia Interior. Allí, la ciudad de Manzhouli -la mayor frontera terrestre entre los vecinos- cerró el paso el miércoles por la noche.
Al igual que lo aplicado en Wuhan, en Suifenhe todos los sectores no esenciales fueron estrictamente cerrados. Por cada hogar sólo una persona tiene permitido comprar artículos de primera necesidad cada tres días. Esa persona debe registrar su nombre, llevar una máscara y someterse a exámenes de temperatura, según indicó el gobierno local.
El cierre de la ciudad se extenderá, por lo menos, hasta el próximo 13 de abril.
Por contener el avance del virus, la autoridades están construyendo un hospital de campaña con 600 camas, que se espera que esté terminado el 11 de abril.
Según la Comisión de Salud de Heilongjiang, el miércoles se registraron 40 nuevos casos de COVID-19, cuando los ciudadanos chinos cruzaron por última vez la frontera.
Esto eleva el número de casos de coronavirus importados a 127, con seis personas en estado crítico. No obstante, esa cifra no incluye a los 154 pacientes asintomáticos importados, según los medios de comunicación estatales chinos. Todos ellos son de nacionalidad china, y la mayoría propietarios de pequeños negocios que trabajan y viven en Rusia.
En medio del avance del coronavirus en Rusia, y la creciente preocupación en el país por la propagación del brote, miles de ciudadanos chinos volaron por todo el país desde Moscú a Vladivostok antes de subir a los autobuses para volver a su país a través de Suifenhe.
Rusia registra hasta el momento más de 10.000 casos de infectados y 76 muertes por el COVID-19.
MÁS SOBRE ESTE TEMA: