Wall Street recuperó este martes algo de terreno con respecto al lunes, que fue el tercer peor día de su historia. El Dow Jones de Industriales, su principal indicador, cerró con un alza de 5,2%, y el selectivo S&P 500 terminó 6% arriba.
Fue una jornada que se esperaba volátil, en la que la preocupación de los inversores disminuyó ligeramente después de que la Reserva Federal y el Tesoro de EE.UU. anunciaron nuevas medidas excepcionales para aumentar la liquidez de los mercados financieros, por un valor de más de 500.000 millones de dólares, para hacer frente a la crisis causada por el coronavirus.
Dow subió 1,048.86 puntos y finalizó en 21,237.38. El S&P 500 aumentó 143.06 y quedó en 2,529.19. Por su parte, el índice compuesto del mercado Nasdaq, que aglutina a importantes empresas tecnológicas, creció 6,46%, al subir 453.57 puntos y culminar la jornada en 7,473.95.
Europa
En Europa la jornada también fue volátil, con un rebote menos pronunciado que el de la bolsa neoyorquina.
Al cierre de los mercados europeos, el IBEX 35 de Madrid ganó más del 6,4 %; el CAC 40 de París, el 2,8 %, en tanto que el FTSE MIB de Milán ganó el 2,23 %; el DAX 30 de Fráncfort ganó el 2,25%, y el FTSE 1000 de Londres, el 2,79%.
Asia
Tokio ha conseguido subir el 0,06 % después de vivir una jornada con mucha volatilidad. El índice Hang Seng de Hong Kong ganó el 1,14%, mientras Shangai perdió el 0,34%.
Petróleo
El barril de petróleo Brent, de referencia en Europa, perdía el 1,06 %, cotizando 29,73 dólares.
El crudo WTI, de referencia en Estados Unidos, perdía un 2,16%.
La debacle del lunes sigue golpeando al mercado
Durante la volátil apertura de este martes, con el Dow fluctuando entre ganancias y pérdidas, llegando a ganar hasta 500 puntos para luego rozar el rojo con rapidez en tan solo 15 minutos, mientras que el sentimiento generalizado de los inversores para la sesión de hoy es ligeramente positivo tras el anuncio de Trump en el que ha afirmado que ayudaría financieramente a las industrias, como el sector aéreo, que estén sufriendo las consecuencias más severas de la crisis del COVID-19.
A través de Twitter, el presidente señaló que Estados Unidos “apoyará poderosamente a aquellas industrias, como las aerolíneas y otras, que se están viendo particularmente afectada por el Virus Chino -sic-. Volveremos a ser más fuertes que nunca”.
Además, los analistas señalan que el parqué ha recibido de forma positiva la noticia de que el secretario del Tesoro, Steve Mnuchin, pedirá a los legisladores de la Cámara de Representantes paquetes de estímulos de hasta 850.000 millones de dólares, o más, para que la economía estadounidense resista al impacto del COVID-19.
De momento, al menos 4.281 casos de este patógeno se han confirmado en Estados Unidos, que ha tenido problemas para llevar a cabo los tests, con más de 70 muertos, según datos del Instituto John Hopkins.
Por ahora, los inversores se centran en descifrar si los estímulos de la Reserva Federal, los paquetes de ayuda y la gestión de la crisis serán suficientes para evitar una recesión económica y, en caso de que sea inevitable, si se alargará en el tiempo.
Por sectores, las mayores ganancias eran para los servicios públicos (3,11 %), el de bienes esenciales (3 %) y el de salud (1,21 %).
MÁS SOBRE ESTE TEMA: