Aunque el temor en torno al contagio por el nuevo coronavirus (COVID-19) se ha convertido en algo con lo que se debe vivir todos los días en países asiáticos, la gente no puede dejar de realizar sus tareas cotidianas, lo cual los expone a la posibilidad de contraer la enfermedad, como le sucedió a Thongsuk Thongrat, un taxista tailandés de cerca de 50 años de edad.
La historia de Thongrat comenzó hace un par de semanas, cuando se encontraba atorado en el tránsito. En el lugar del pasajero viajaba una mujer china que le había llamado para que la llevara al hospital. Durante el viaje, ella se acercó al conductor para indicarle algunos sitios turísticos en los que estaba interesada, y entonces estornudó dentro de su automóvil.
Algunas gotas cayeron en el rostro de Thongrat, lo cual le hizo pensar: “Ella es bonita, pero no tiene modales”, según lo recabado por el diario estadounidense The New York Times. Después de unos días, las pruebas a las que fue sometido el sujeto, resultaron positivo por coronavirus.
Este hecho deja en evidencia que los riesgos para los choferes en el aquel país asiático son altos, pues suelen estar en contacto con turistas de otras naciones, incluso en la actualidad, cuando la reducción de viajes alrededor del mundo ha impactado en economías cuya base se sustenta en el turismo, como en el caso de Tailandia, donde alrededor del 10% del PIB proviene de esta actividad.
Cabe recordar que el primer paciente local de coronavirus en ese país también fue un taxista, quien presuntamente habría sido contagiado por otro turista chino, el cual dejó el país a finales del mes de enero, informaron las autoridades tailandesas.
Un dato relevante al respecto lo dio la policía de inmigración de Tailandia, pues indicó que a inicios de febrero, las visitas de personas chinas provenientes de la comunidad de Wuhan, en donde se originó el brote de este nuevo coronavirus ascendía a más de 2.730, aunque la anteriormente el Ministerio de Sanidad había dado la cifra aproximada de 10.000.
De hecho, en el aeropuerto de Tailandia, país en el que el coronavirus ya ha infectado a 41 personas, las imágenes de conductores tanto de taxistas como de otros transportes públicos con mascarillas en el rostro y líquidos desinfectantes en las manos para esterilizar sus vehículos es algo común, pues se mantienen con el temor de que les suceda lo mismo que a Thongrat.
Después de 14 días en una unidad de aislamiento en un hospital de Bangkok, Thongsuk Thongrat ya fue dado de alta; sin embargo, su regreso a las labores, reportó The New York Times, no ha sido el esperado, ya que el 60% de sus clientes eran visitantes chinos, cuyo número se ha visto disminuido a raíz de las prohibiciones que el gobierno de China puso a sus ciudadanos para salir del país.
Acerca de las complicadas experiencias que ha tenido en las últimas semanas, Thongrat se mostró decaído: “Debo tener mal karma para enfermarme tan pronto como comencé a conducir de nuevo”, comentó en relación a que había vuelto al negocio de los taxis tan sólo hace cinco meses.
El panorama no es alentador en otros países asiáticos como Corea del Sur, el cual se ha convertido en la nación con más casos de contagio por día, pues este viernes alcanzó las 571 personas infectadas por el coronavirus, cifra que está incluso por encima de los contabilizados en China (327).
De los nuevos casos, 511 corresponden a Daegu y la circundante provincia de Gyeongsang del Norte, donde la secta cristiana Shincheonji es el principal foco de infección, de acuerdo con información del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades Contagiosas de Corea (KCDC).
Algunos expertos consideran que la cifra de contagios seguirá subiendo debido a que el gobierno comenzó a realizar pruebas el miércoles a cerca de 212.000 miembros de Shincheonji, a los que hay que sumar unos 65.000 aprendices del grupo.
MÁS SOBRE ESTE TEMA