El Consejo de Estado de China nombró este martes a Tang Ping-keung nuevo jefe de la Policía de Hong Kong ante el recrudecimiento de las protestas que golpean la región administrativa especial china desde hace ya cinco meses.
Tang, también conocido como Chris Tang, sustituirá así a Lo Wai Chung, quien se retiró, según reportó la agencia estatal de noticias Xinhua. La decisión ha sido tomada en concordancia con la Ley Básica, el texto constitucional con el que la región volvió a estar bajo soberanía china en 1997. El nombramiento se realizó siguiendo las recomendaciones de la jefa de Gobierno hongkonesa, Carrie Lam.
El ejecutivo local pro-Beijing de este territorio semiautónomo no ha logrado imponer la paz, frente a manifestaciones cada vez más violentas, ni acabar con el movimiento, que exige reformas democráticas y se opone a la creciente injerencia china en los asuntos de Hong Kong.
China sufrió incluso un revés el lunes, cuando la Alta Corte de justicia hongkonesa invalidó la prohibición de portar mascaras en las manifestaciones, medida que fue decretada en octubre por el ejecutivo local. De inmediato, el régimen del presidente Xi Jinping consideró nula esta decisión de la justicia de Hong Kong.
Según sostiene beijing, únicamente la Asamblea Nacional Popular (el congreso chino) tiene el poder para decidir si una ley es o no conforme con la ley fundamental de Hong Kong. “Ninguna otra institución tiene del derecho de hacer juicios o tomar decisiones” en materia constitucional sobre el territorio hongkonés, declaró este martes un portavoz del parlamento chino.
Las protestas en Hong Kong estallaron el pasado mes de junio contra un polémico proyecto de ley de extradición a la China continental. Lam acabó retirando definitivamente el proyecto de ley pero las protestas han continuado con demandas mayores, incluido el sufragio universal.
Mediante su embajador en el Reino Unido, Liu Xiaoming, China advirtió este lunes que no seguirá con “los brazos cruzados” si la situación en el territorio se convierte en “incontrolable”. Hong Kong “se desliza hacia el abismo” sentenció el embajador, y auguró que el “futuro será horroroso” si prosiguen las violencias.
La violencia en Hong Kong se ha convertido así en el mayor desafío para el presidente chino, Xi Jinping, que llegó al poder en 2012 e insiste en que el Gobierno local podrá resolver la crisis.
Los manifestantes, enfadados por lo que consideran una injerencia del Gobierno chino en la antigua colonia británica, han defendido que están respondiendo al excesivo uso de la fuerza por parte de las fuerzas de seguridad.
Beijing, por su parte, ha rechazado cualquier tipo de intervención en los asuntos de Hong Kong y ha culpado de la situación a la influencia de terceros países.
(Con información de Europa Press y AFP)
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