Por las turbulencias, una azafata se estrelló contra el techo de la aeronave (Video: Twitter @dan_ialm)
Gritos, bebidas calientes que caían en todas direcciones, y un vuelo que parecía estar a punto de estrellarse: así fueron los minutos de angustia que vivieron los pasajeros de un vuelo de la aerolínea búlgara ALK Airlines al atravesar una zona de turbulencias.
Este fin de semana, los viajeros embarcaron en el avión que les llevaría desde Pristina, capital de Kosovo, hasta el aeropuerto EuroAirpor Basel, ubicado en Francia, cerca de la frontera con Suiza y Alemania.
En un momento del trayecto, cuando las azafatas pasaban por el pasillo para ofrecer bebidas y aperitivos a los tripulantes, sonó la megafonía del avión. El piloto advirtió que estaban a punto de atravesar un área de turbulencias, por lo que pidió a los pasajeros que permanecieran sentados en sus asientos con el cinturón abrochado.
Segundos después de que sonara el mensaje, el avión comenzó a temblar y a dar tumbos bruscos en el aire. Los viajeros no pudieron evitar gritar por el terror del violento traqueteo, tal y como se aprecia en el video que grabó uno los presentes.
Las imágenes compartidas en Twitter muestran cómo las turbulencias son tan fuertes que el carrito y una de las azafatas salen disparados durante una de las sacudidas y se estrellan violentamente contra el techo. Entonces, todas las bebidas, los envases y algunos productos caen sobre los pasajeros, que chillan y se agarran como pueden al respaldo de los asientos delanteros.
La mujer que grabó el video confesó que estaba convencida de que el avión se estrellaría en cualquier momento. Reveló que 10 pasajeros tuvieron que ser trasladados al hospital tras el aterrizaje por contusiones y quemaduras, estas últimas provocadas por las bebidas ardiendo que cayeron sobre los turistas, según informó la cadena de televisión estadounidense abc 7.
Según contó, una de las personas que tuvo que acudir al hospital fue su esposo, aunque no detalló por qué motivo.
A pesar de que los pasajeros vivieron unos minutos terribles de angustia, los pilotos y expertos insisten en que no hay nada que temer.
"Evitamos la turbulencia porque estresa a los pasajeros, pero para los pilotos no es problema. Los aviones modernos están diseñados para aguantar mucha más fuerza que la que la turbulencia puede crear", explicó en una entrevista con Vice Keith Tonkin, ex piloto militar y director del grupo de consultoría Aviation Projects.