Los investigadores del caso de Tammy Lawrence-Daley, la estadounidense que fue brutalmente atacada dentro de las instalaciones del hotel Majestic Elegance, en Punta Cana, cuestionaron el relato de la turista de Delaware.
"Hay muchas conjeturas sobre el caso, mucha información que no coincide con algunas de las declaraciones", explicó este lunes el portavoz jefe de la Policía Nacional de República Dominicana, Frank Durán.
Según las autoridades, existen incongruencias entre el relato de Tammy y el de su esposo, Christopher Daley. De acuerdo con la información facilitada por Ney Aldrin Bautista, director de la Policía Nacional del país caribeño, se reveló que "no se encontró evidencia alguna que diera con una persona que tuviera las características del agresor que ella describió".
Las declaraciones de los agentes llegan solo días después de que el esposo de Tammy se quejara públicamente de graves errores en la investigación. Christopher Daley indicó que aún no contaba con un informe policial, aunque las autoridades se habían comprometido a entregarlo el pasado febrero.
"Supuestamente nos iban a enviar un informe policial en febrero, pero nunca lo conseguimos", apuntó.
También desmintió la afirmación de la Fiscalía General de República Dominicana, que aseguró que Tammy había rechazado presentar una denuncia formal. El matrimonio negó rotundamente la versión de la Fiscalía y contó que sí reportó lo ocurrido en un juzgado del municipio de Higüey antes de abandonar República Dominicana.
A pesar de todos estos "errores", para el esposo de Tammy la mayor omisión se produjo en el hospital. Reprochó que los médicos no le realizaron a su esposa un examen de violación hasta dos días después del ataque.
"Tuvimos que obligarlos a hacerle un examen de violación, y eso no ocurrió hasta 48 horas después", se quejó.
El informe médico determinó que Tammy no fue agredida sexualmente por el atacante. Un resultado que podría haberse visto alterado por la demora del test, en opinión de Daley.
Un relato público y ensordecedor
Desesperada por la falta de avances en la investigación, y temiendo que "el depredador" ataque a una nueva víctima, Tammy publicó su relato en Facebook, la misma versión que ahora cuestionan las autoridades.
A través de la red social, contó que su pesadilla comenzó durante su segundo día de vacaciones en Punta Cana. La madre de dos niños explicó que aquella noche, antes de irse a dormir, sintió mucha hambre. Como el servicio de habitaciones ya no estaba abierto, salió de la habitación y bajó a una máquina expendedora a comprar algo para comer.
"Cuando pasé por la rotonda entre los edificios, noté que no había nadie en el pasillo.No muy extraño, pero todavía inquietantemente tranquilo. Di unos diez pasos o más , simplemente balanceándome de un lado a otro, sin preocuparme por nada del mundo. Fue entonces cuando lo oí. Pasos pesados… uno, dos, tres, cuatro, luego se aceleraron, y después, antes de que pudiera reaccionar, fui agarrada por detrás e inmovilizada de inmediato. Sus brazos me envolvieron y comenzó a empujarme de inmediato a una sala de mantenimiento sin abrir…"
No voy a entrar en los detalles sangrientos de todo, sin embargo, ten en cuenta que luché con todo lo que tenía en ese momento. Era demasiado fuerte. Las siguientes ocho horas me trajeron dolor y miedo. Fui estrangulada varias veces hasta la inconsciencia. Mi cuerpo sin vida fue arrastrado por las escaleras de concreto a un área subterránea de aguas residuales. Me patearon en la cabeza, me golpearon con un palo y luego me estrangularon de nuevo; en ese momento, él desechó mi cuerpo en un área a la que me refiero como el "agujero". Estuve inconsciente varias veces durante este ataque salvaje, así que no tengo idea de qué más me hizo durante ese tiempo. De alguna manera sobreviví. Una vez más, no voy a entrar en todo el infierno por el que pasé por estar básicamente "enterrada" en ese infierno durante tantas horas.
Según su versión, una persona que llevaba un uniforme con el logo del hotel la "estranguló", "le pateó la cabeza" y "la golpeó con un palo". Los trabajadores del resort, sus familiares y amigos no encontraron a Tammy hasta ocho horas después de su desaparición.
"Pensó que me había matado, pero fracasó. Él todavía está ahí fuera, es un depredador esperando a su próxima víctima. Solo que la próxima mujer puede no ser tan afortunada. Por favor, por favor, no camines sola. Estos ataques ocurren con mucha frecuencia y los delincuentes NO están siendo procesados a pesar de que se encuentran pruebas. Las víctimas no reciben compensación médica ni de dolor y sufrimiento, y los centros turísticos no son responsables. Majestic Elegance no ofreció reembolsarnos nuestras vacaciones, y mucho menos mis gastos médicos actuales. Los litigios no fueron a ninguna parte. Las historias están siendo aplastadas", se quejó Tammy.
La policía ha confirmado que la investigación aún continúa abierta y que por este motivo no puede revelar más detalles del caso.