Informes recientes de los medios de comunicación estatales iraníes aseguraron, citando a funcionarios del régimen, que el desarrollo de la Red Nacional de Información (NIN) iraní, una tecnología compuesta por una intranet y un firewall capaz de censurar medios y bloquear redes sociales, está completo en un 80%.
El Consejo Cultural Supremo Revolucionario, que lleva años trabajando en el NIN, sostuvo que se trata de un "proyecto para desarrollar una red de infraestructura segura y estable en Irán". Sin embargo, desde Washington, la administración de Donald Trump ha expresado su preocupación porque considera que se trata de una más de las medidas del régimen fundamentalista islámico dirigidas a "reprimir la libertad de internet a través de una vigilancia draconiana".
Consultados por la agencia de noticias VOA Persian días atrás, un portavoz del Departamento de Estado dijo que "los países que toman medidas tan desesperadas le demuestran al mundo que tienen miedo de su propia gente".
Los funcionarios del régimen iraní han dicho que el NIN protegerá a Irán de los ataques cibernéticos y permitirá a los iraníes acceder a contenido islámico a una alta velocidad y bajo costo, pero no han revelado su contracara: que la red, en rigor, será una intranet dirigida a aislar a su población del resto del mundo online.
El periódico Iran Tribune -aprobado por el régimen islámico- informó que el NIN abarca varios proyectos, incluida la expansión de la red local de fibra óptica, la instalación de puntos de intercambio de Internet (IXP) y el impulso a las redes de distribución de contenido (CDN).
El secretario del Consejo Supremo de la Revolución Cultural de Irán, Saied Reza Ameli, fue el primero en dar a conocer la noticia de que el NIN tiene un grado de avance de un 80%. Fue en una ceremonia el 19 de mayo con motivo del Día Mundial de las Telecomunicaciones. El conservador Consejo Supremo de la Revolución Cultural es el organismo que, mediante la censura, ejerce la función de policía política del régimen islamista en Internet.
El ministro de Tecnologías de la Información y la Comunicación de Irán, Mohammad Javad Azari Jahromi, también sostuvo este domingo, en sus redes sociales, que la red que servirá para aislar a los iraníes se encuentra avanzada en un 80%.
Si bien aún no se conocen precisiones sobre qué es lo que falta para que el NIN entre en funcionamiento, algunos de los informes recientes de los medios de comunicación estatales sostienen que Irán ha conectado al 80% de su población rural con el NIN.
El sueño iraní de mantener a aislada de internet a su población no es nuevo. El ex encargado de inteligencia nacional de Estados Unidos para Irán, Norman Roule, dijo en una reciente entrevista telefónica con VOA Persian que Irán ha estado desarrollando el NIN desde 2006 con varios objetivos en mente.
"Para 2006, el régimen iraní vio que internet significaba el ingreso de una gran cantidad de cultura extranjera al país. También permitió que los elementos de la oposición interactuaran libremente y difundieran sus ideas entre el pueblo iraní. Y esto era intolerable", dijo Roule. "El NIN le permite a Irán monitorear lo que su gente está viendo y avanzar en la desactivación de las redes privadas virtuales (VPN) que usaron para evitar la censura de sitios web extranjeros. Así que, en esencia, se trata de sofocar la oposición", explicó.
Los iraníes han usado redes privadas virtuales para acceder a sitios web extranjeros y redes sociales que su gobierno ha bloqueado en los últimos años. En un discurso divulgado el domingo por la agencia estatal de noticias ISNA, la brigadier general iraní Golamreza Jalali, del Cuerpo de Guardias Revolucionarios Islámicos, dijo que Teherán reforzará los bloqueos de redes sociales extranjeras si las recientes tensiones entre Estados Unidos e Irán se intensifican, con la excusa de evitar que los Estados Unidos influyan en la opinión pública iraní.
La inversión de Irán en el NIN ha ascendido a 120 billones de rials en fondos del gobierno y 70 billones de rials en fondos del sector privado, es decir, unos USD 2.85 mil millones y USD 1.66 mil millones, respectivamente, según el tipo de cambio oficial de Irán.
Si bien el NIN crea "una industria cibernética iraní", porque las únicas aplicaciones y software permitidas serán los creados dentro de Irán, para Roule la exclusión de tecnología extranjera tendrá un impacto negativo en el mercado laboral iraní: "Podría muy bien contribuir a la fuga de cerebros que está viendo Irán, porque sus mejores ingenieros quieren trabajar con las mejores tecnologías que se están desarrollando en toda la región, y simplemente no estarán en Irán".
La ministra iraní de TIC, Azari Jahromi, quien participó en el mismo evento del 19 de mayo que Ameli, utilizó el evento para resaltar el papel del NIN en la protección de la industria iraní de las amenazas cibernéticas externas, como el gusano informático Stuxnet, que dañó las instalaciones de enriquecimiento nuclear de Teherán en 2010.
Los medios estatales dijeron que Azari Jahromi anunció que Irán había instalado el firewall de NIN en los sistemas de control industrial fabricados por el conglomerado alemán Siemens y que pronto hará lo mismo con los sistemas de control industrial fabricados por otras marcas que se utilizan para operar y automatizar procesos industriales.
El sitio web de Siemens dice que ha contribuido a proyectos de infraestructura clave en Irán durante casi 150 años. Un portavoz de Siemens con sede en Alemania se negó a comentar a VOA Persian sobre la afirmación de Irán sobre el punto.
Para Roule, "el NIN tiene ventajas en términos de protección cibernética, pero al aislarse del mundo, Irán confía en tecnologías cibernéticas de décadas de antigüedad que son cada vez más frágiles". El veterano retirado oficial de la CIA dijo que sería un desafío para Irán llevar esas tecnologías obsoletas al NIN: "Sospecho que probablemente tienen muchos más problemas de los que están dispuestos a admitir".
En su declaración a VOA Persian, el Departamento de Estado dijo que continuará trabajando con las compañías de tecnología y el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos para apoyar el libre tránsito de información en Irán.