El ejército de Alemania está investigando qué información recolectaron tres periodistas chinos mientras que la canciller Angela Merkel visitaba una unidad de la OTAN, lo que indica una alta desconfianza hacia la agencia de noticias estatal Xinhua.
Los periodistas de Xinhua levantaron sospechas al filmar equipo militar y entrevistar a los soldados sobre sus rutinas diarias, según una persona familiarizada con el incidente que pidió no ser identificada hablando sobre temas de seguridad. Iban con las credenciales apropiadas, como los demás periodistas, para ingresar a la base e informar sobre la visita de Merkel al área de capacitación de la Fuerza Conjunta de Alta Preparación en Münster, Alemania, el 20 de mayo.
Un funcionario de inteligencia alemán dijo que Xinhua ha estado bajo observación durante algún tiempo debido a sus vínculos con el partido comunista gobernante de China. La inteligencia alemana considera que los periodistas de Xinhua alimentan los esfuerzos de propaganda chinos y ayudan a recopilar datos e información en el extranjero que posteriormente se pondrán en uso oficial, dijo el funcionario.
Un representante de la Oficina en el Extranjero de Xinhua aclaró que sus periodistas no están siendo investigados formalmente y que sus actividades en Alemania, incluyendo entrevistas, eran normales.
El gobierno de Estados Unidos ordenó a Xinhua y la emisora China Global Television el pasado mes de septiembre que se registraran en virtud de la Ley de registro de agentes extranjeros. Como resultado, se requiere que en Estados Unidos Xinhua divulgue actividades y gastos y que presente exenciones de responsabilidad con respecto a su contenido periodístico.
La medida puede enmarcarse también en el conflicto reciente entre Washington y la compañía de telecomunicaciones Huawei, a la cual se le ha prohibido el ingreso al mercado estadounidense por las sospechas de que ésta funciona como un agente del gobierno chino y del Partido Comunista de ese país.
Además, Washington y Beijing se encuentra en medio de una escalada de tensiones causada por la guerra comercial que inició el año pasado entre ambos países, con cientos de miles de millones de bienes afectados por tarifas, un conflicto que a su vez es parte de la competencia geopolítica entre las dos principales economías del mundo.
Alemania no tiene una clasificación de este tipo para la organización de medios, aunque los periodistas pueden ser procesados si cometen un delito.
Recientemente Berlín y Beijing han también entrado en conflicto por el asilo otorgado por Alemania a Ray Wong y Alan Li, activistas chinos que buscan la independencia de Hong Kong y que lograron escaparse a Europa en 2017.
El sábado el ministerio de Exteriores de China realizó una "presentación solemne" ante el cónsul alemán en Hong Kong para que "corrija el error".
"China insta a Alemania a reconocer sus errores y cambiar de curso, y a no aceptar ni condonar a criminales, interfirieron en los asuntos de Hong Kong y de China", señaló el ministerio precisamente a través de Xinhua.
Con información de Bloomberg y Reuters
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