El jefe de la junta militar de Sudán, Abdelfatah al Burhan, ha asegurado que, si las fuerzas políticas del país alcanzan un acuerdo sobre un Gobierno civil, los militares podrían entregarle el poder "mañana", aunque ha reiterado que el periodo transitorio establecido es de dos años.
"La opción adecuada son dos años, basándose en las experiencias anteriores, pero si las fuerzas políticas se reúnen y se ponen de acuerdo, y presentan una propuesta para un Gobierno de consenso, mañana podemos entregarle el poder", declaró en una entrevista con la televisión estatal sudanesa.
Asimismo, remarcó que "el periodo transitorio es de, máximo, dos años", tal y como viene prometiendo la junta desde que tomó el poder el pasado 11 de abril tras apartar del mando al dictador Omar al Bashir.
Al Burhan consideró en su primera entrevista con un medio de comunicación que "es mejor que el Gobierno transitorio sea tecnócrata", pero agregó que esta cuestión todavía se está discutiendo con las fuerzas políticas, que han mantenido varias reuniones con el denominado Consejo Militar Transitorio.
Por otro lado, el general mostró el interés de la junta militar en mantener buenas relaciones con los países africanos y árabes de la región, incluso aquellos que han rechazado el derrocamiento de Al Bashir a manos del Ejército tras casi cuatro meses de protestas en las calles.
"Nos hemos reunido con varios representantes diplomáticos y ellos comparten la misma visión sobre el traslado del poder a un Gobierno democrático elegido, y están seguros de que estamos trabajando con este objetivo", declaró Al Burhan.
Destacó que no existe "ninguna disputa" con otros países y que la junta ha acordado con ellos la "aceleración del traslado del poder a una autoridad civil".
"Hemos recibido llamadas, mensajes y delegaciones de países vecinos e importantes de todo el mundo: Arabia Saudí, Chad, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Qatar, Sudán del Sur, Etiopía, Kenia, Turquía, EE.UU., Francia, Rusia, China, Austria y Libia", detalló.
Al Burhan se refirió a la Unión Africana, que en un primer momento calificó de "golpe" lo ocurrido en Sudán, y señaló que el organismo "reaccionó de manera eficaz" y un representante se encuentra actualmente en Jartum para comprobar que "no es un golpe militar sino una revolución popular".
"La Unión Africana entiende eso y agradecemos a Egipto (que ocupa la presidencia de turno del organismo) y a otros países vecinos su esfuerzo en este sentido", manifestó Al Burhan.
El jefe de la comisión de la Unión Africana, Moussa Faki Mahamat, concluyó hoy una visita de dos días a Sudán, donde se reunió con la junta militar, la oposición y representantes de la sociedad civil y de la comunidad internacional.
En sus encuentros, destacó la necesidad de acordar una "transición de consenso liderada por civiles" que lleve a la celebración de "elecciones libres, limpias y transparentes, que marquen un punto de inflexión en la transformación democrática del país", según un comunicado.
Por su parte, los líderes de la protesta civil suspendieron este domingo las conversaciones con el consejo militar para conseguir un traspaso del poder a los civiles, e instaron a miles de manifestantes a proseguir con su sentada frente al cuartel militar en Jartum.
"Continuaremos la sentada. Estamos suspendiendo nuestras conversaciones con el consejo militar", anunció Mohamed Al Amin, portavoz del movimiento.
"Estamos considerando al consejo militar como una extensión del régimen" depuesto este mes agregó Amin, quien también pidió a los manifestantes que intensifiquen sus protestas hasta que el ejército responda al reclamo de transferir el poder a un consejo civil.
"Pedimos que se intensifiquen y continúen las manifestaciones hasta que se cumplan las demandas", dijo.
"Libertad, paz, justicia" coreaba la multitud. "Nuestra revolución es civil, está protegida por el pueblo", gritó uno de los manifestantes.
Con información de EFE
MÁS SOBRE ESTE TEMA: