Airbus obtuvo un acuerdo de US$35.000 millones en China durante una visita de Estado del presidente Xi Jinping a la capital francesa, lo que significa un nuevo golpe a Boeing mientras debe hacer frente a la prohibición de su avión más vendido.
El gigantesco pedido incluye 290 aviones de la serie A320 y 10 A350, señaló el martes la oficina del presidente francés, Emmanuel Macron. El modelo A320neo más reciente tiene un precio de US$110,6 millones y el A350-900 se vende por US$317,4 millones antes de aplicar descuentos.
El 737 Max de Boeing, el principal rival del A320, permanece inactivo luego de dos accidentes en cinco meses. La fabricante de aeronaves estadounidense también debe lidiar con las consecuencias de la guerra comercial entre China y EE.UU. que ha generado un descenso de las ventas al gigante asiático.
El importante acuerdo para Airbus, con sede en Toulouse, Francia, fue publicitado por primera vez por Macron en enero de 2018 durante un viaje a Pekín, ocasión en la que se habló de una transacción de US$18.000 millones. No obstante, no se materializó una oferta concreta pese a una segunda visita de Estado francesa en junio y otra de una delegación de altos ejecutivos de Airbus en septiembre.
El acuerdo anunciado en París incluirá tanto al Neo como a las versiones clásicas o CEO del A319, A320 y A321, aunque la mayoría serán A320neos y A321neos, según funcionarios. China normalmente solicita aviones en grandes cantidades para luego asignarlos a sus aerolíneas.
El gigante asiático se ha convertido en el mercado más importante para Airbus y Boeing a medida que su clase media de incrementa la demanda de viajes. Mientras las perspectivas de pedidos de la compañía estadounidense se han complicado debido al conflicto comercial, Airbus ha reforzado su posición con una oferta orientada a ampliar una línea de producción en Tianjín.