Un niño nadaba con tiburones en Bahamas cuando fue mordido y arrastrado por uno de los animales

Las imágenes capturaron el susto del padre, que agarró al tiburón para evitar que hundiera al pequeño bajo el agua.

Guardar

(Video: Pen News)

En los Cayos de Exuma, Bahamas, una familia estadounidense nadaba en aguas turquesas junto a tiburones nodriza, cuando la idílica excursión se tornó en una traumática pesadilla: uno de los animales, sintiéndose acosado por los turistas, mordió a al pequeño Asher Jones en la espalda, provocándole una gran herida en el costado derecho.

Las imágenes, que fueron capturadas por uno de los integrantes del grupo, muestran a los tiburones nadando pacíficamente a poca profundidad. Los visitantes, animados, comenzaron a tocar a los tiburones agitadamente. El hostigamiento alteró visiblemente a los animales, que trataron de escapar. En su apresurada huida, se topó con el pequeño, de solo ocho años, al que mordió en la espalda clavándole sus afilados dientes.

Según explicó el pequeño Asher, en un primer momento pensó que se trataba de su padre, que fingía ser un tiburón que le atacaba por la espalda. "Fue horrible. Al principio pensé que era mi padre fingiendo. Pero luego pensé no, mi padre nunca me hería daño, porque sentí que algo se hundía en mi piel" explicó Asher a Pen News.

Cuando se percató de lo que realmente estaba ocurriendo y sintió la mordida del tiburón comenzó a gritar presa del pánico.

Dios mío! [Oh my god]" exclama una mujer al escuchar los quejidos del niño.

Quiero salir! [I want to get out]" chilla otro pequeño aterrorizado, mientras se escuchan de fondo los alaridos de todos los menores.

El padre de Asher se apresuró a rescatar a su hijo, tirando de él para evitar que el tiburón lo arrastrara. Al tomarlo en sus brazos, observó que en el costado derecho presentaba una herida ensangrentada en la que casi puede delinearse la mandíbula del animal.

(Foto: Pen News / Christine Jones)
(Foto: Pen News / Christine Jones)

Aunque los tiburones nodriza se caracterizan por su carácter apático y tranquilo, pues son dóciles y generalmente inofensivos, los expertos advierten de que pueden llegar a atacar si se sienten acosados, sin importar que las caricias sean cariñosas o descuidadas.

A pesar del terrible susto, el pequeño estadounidense habría corrido con una especie de "suerte", pues según explican los especialistas, cuando este tipo de tiburón muerde, su mandíbula se cierra herméticamente, y para abrirla de nuevo, tiene que ser forzada por pinzas o tenazas de titanio.

(Foto: Pen News / Christine Jones)
(Foto: Pen News / Christine Jones)

Tras el incidente, muchos han sido los que han señalado la falta de responsabilidad de los padres. Procedentes de Utah, Estados Unidos, estos defienden que les habían asegurado que los animales no eran agresivos.

"Nos dijeron que los tiburones nodriza eran dóciles y nada agresivos, y que si queríamos acariciarlos nos asegurásemos de tocar la parte superior de sus cabezas y su espalda" narró la madre, Christine Jones, de 42 años.

Asher Jones (Foto: Pen News)
Asher Jones (Foto: Pen News)

A pesar de que en principio creyó que sería como nadar con dóciles cachorros, ahora entiende que los tiburones nodriza son animales salvajes, y como tales sus interacciones son muy difíciles de prever. Asegura que después de haberse informado bien, no permitiría que sus hijos entrasen de esa forma en el agua e interactuasen con los tiburones de la manera en que lo hicieron.

"Escuché a Asher gritando, pero no cualquier grito sino ese tipo de chillido que provoca que de pronto el mundo de una madre se ralentice, a cámara lenta […] Solo pensar en sus gritos me ponen enferma y mi corazón se acelera".

Christine también explicó que su hijo tuvo mucha suerte de que el padre actuara rápido. Narró que el tiburón habría hundido a Asher arrastrándolo bajo el agua si no hubiera sido por la intervención de su padre.

Hoy Asher ya superó el horrible susto, y aunque su herida cubrió buena parte de su espalda, no precisó puntos, pues no era demasiado profunda. Según contó su madre, él realmente pensaba que iba a morir. Cuando se dio cuenta de que estaba bien y de que no había ocurrido nada que lamentar, se fue tranquilizando y ahora cuenta su increíble historia a todo el que la quiera escuchar.

View this post on Instagram

Mi mayor aspiración siempre ha sido poder contarle a quien tenga al lado cuando sea muy mayor, todas las experiencias que viví a lo largo de mi vida y todo lo que me enriquecieron como persona, como hace mi abuela ahora conmigo. Que nadé con tiburones en Bahamas. Que bailé en la bodeguita del Medio y por las calles de La Habana. Que conocí la fundación de Vicente Ferrer en la India. Que la serpiente acuática más venenosa del mundo se coló en la habitación de mi hotel en Nueva Caledonia, en la Melanesia francesa. Que surfeé en Canguu y visité una Chamán en Bali. Que me quedé sin palabras al ver a los Guerreros de Terracota en China. Que me atrapó la magia de Marruecos. Que Nueva York siempre será mi ciudad, la que más me ha visto cambiar. Que de México siempre me quedaré con sus playas. Y su gente. Siempre su gente. Que Roma alcanzó un significado especial cuando mis amigas me llevaron por sorpresa. Que pasé un mes en Victoria, una isla enfrente de Vancouver. Y otro en Toronto. Y descubrí que desde su torre se ve Torontontero. Que pocos atardeceres se asemejan a los de República Dominicana. Que Nueva Zelanda me fascinó y quise formar parte del elenco de Perdidos. Que Australia me invito a ir descalza todo el día. Que quise casarme en Las Vegas, aunque me faltó con quien. Pero que Los Ángeles dentro de su caos, a mi me daba calma. Pero que cuando quiero perderme, siempre acabo en Formentera. A veces me parece que he vivido muchas vidas ya. Y cuando creo que ha sido un sueño, abro los ojos y sigo viviendo nuevas ❤️ Mery Turiel

A post shared by María Turiel Soler (@meryturiel) on

Bañarse con los tiburones nodriza en el Mar de Exuma es una tendencia cada vez más extendida entre las influencers, que esperan conseguir atractivas fotografías para sus perfiles de Instagram. La española Laura Matamoro, también fue atacada por uno de estos animales durante sus recientes vacaciones en Bahamas.

MÁS SOBRE ESTE TEMA: 

Guardar