Venecia suele inundarse cuando los vientos fuertes empujan el agua desde la laguna, pero los niveles del lunes fueron excepcionales, los más altos de la última década, lo que desató inusuales escenas en los comercios locales.
Los habitantes y negocios suelen reforzar sus puertas con paneles de madera o metal para impedir que se inunden las plantas bajas, pero fotos en las redes sociales mostraban a los tenderos bombeando agua para tratar de proteger su mercadería.
Un video grabado en una pizzería veneciana mostró la serenidad con la que los empleados y comensales afrontaban la situación, como si fuese un hecho común y corriente almorzar con el agua por encima de los tobillos.
Preparados con botas, los mozos continuaban repartiendo las pizzas manteniendo el equilibrio, mientras que la mayoría de los clientes usaban bolsas para proteger el calzado. Algunos sonríen ante el contraste entre la acogedora decoración del restaurante y el sonido de la corriente de agua.
La mayor parte de Italia está bajo alerta de inundaciones provocadas por fuertes lluvias, un problema que se ve empeorado por la falta de mantenimiento en los cauces de los ríos.
(Con información de AP)
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