Mientras se prepara el asalto final a Idlib, Vladimir Putin y Recep Erdogan se reunirán el lunes para discutir la crisis en Siria

El tema excluyente de la cumbre será la ofensiva sobre el último bastión rebelde en la guerra. Si bien no está confirmado el lugar del encuentro, se cree que será en Sochi

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Vladimir Putin y Recep Erdogan
Vladimir Putin y Recep Erdogan

El presidente de Turquía, Recep Erdogan, se reunirá este lunes con su homólogo ruso, Vladimir Putin, para seguir negociando una solución al conflicto de Siria y la ofensiva en Idlib, anunció hoy el ministro de Exteriores turco, Mevlüt Çavusoglu.

"En los últimos días, hemos estado en contacto con varios países y actores en Siria", dijo Çavusoglu durante una rueda de prensa en Islamabad junto con su homólogo paquistaní, Shah Mahmood Qureshi.

"Estos contactos continuarán y mantendremos entrevistas en los próximos días con Irán y Rusia. El lunes, nuestro presidente, Erdogan, se entrevistará con el jefe de Estado ruso, Putin", dijo, según informan los medios turcos.

El ministro no precisó el lugar de la cumbre, pero varios diarios turcos revelaron que la reunión se celebrará en Sochi, la ciudad rusa en la costa del Mar Negro donde ya tuvieron una reunión sobre Siria en noviembre pasado.

Idlib es blanco de bombardeos
Idlib es blanco de bombardeos constantes desde hace varios días

Por otra parte, hoy se reúnen en Estambul delegados de los Gobiernos de Rusia, Alemania, Francia y Turquía para preparar una próxima cumbre de líderes, también centrada en el conflicto sirio. La cita, anunciada por el propio Erdogan el domingo pasado, dará comienzo a las 11:00 horas GMT, según afirma Anadolu.

Fuentes diplomáticas mencionadas por el diario turco Hürriyet aseguran que Turquía intenta buscar en esta reunión un compromiso para declarar un alto el fuego en Siria, algo que Erdogan ya propuso sin éxito el viernes pasado en la cumbre tripartita en Teherán.

Rusia se opone a un alto el fuego, alegando que el régimen de Damasco debe recuperar el control sobre la provincia de Idlib, la única zona importante de Siria aún en manos de milicias rebeldes, que reciben apoyo de Turquía. Pero Ankara insiste en que una ofensiva militar podría significar una catástrofe para la población civil y desencadenar una nueva oleada de refugiados que intentarían ponerse a salvo en Turquía.

"Estamos listos para asumir un papel en la lucha contra el terror. Pero estamos en contra de que se ataque a mujeres, niños, civiles, bajo pretexto de luchar contra el terrorismo", reiteró Çavusoglu hoy en Islamabad.

Decenas de miles de personas
Decenas de miles de personas debieron abandonar sus hogares (AFP)

Más de 38.500 desplazados

La violencia en el noroeste de Siria desplazó a más de 38.500 personas en lo que va de septiembre, en medio de una escalada de "hostilidades" en la provincia de Idlib, blanco de los bombardeos del régimen y de su aliado ruso, anunció este jueves Naciones Unidas. El organismo se prepara para brindar ayuda a 900.000 personas, declaró por otro lado Panos Moumtzis, coordinador humanitario regional de la organización para la crisis siria durante una rueda de prensa.

Situada en el noroeste sirio, en la frontera de Turquía, la provincia de Idlib y los territorios insurgentes adyacentes fueron en los últimos días blanco de bombardeos con artillería por parte del régimen y ataques aéreos de Moscú.

"Entre el 1 y el 12 de septiembre, las informaciones disponibles señalan que el fuerte aumento de las hostilidades y los temores de una nueva escalada condujeron al desplazamiento de más de 38.500 personas", señaló la Oficina de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA).

La ONU estima que más de 4.500 de ellas regresaron a sus casas entre el 10 y el 12 de septiembre. Según la OCHA, la mayoría de los desplazados provenían de la provincia de Idlib. Muchos se dirigieron hacia el norte, hacia las comunidades y campos de desplazados situados a lo largo de la frontera con Turquía.

(Con información de EFE y AFP)

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