La mayoría de los doce niños atrapados durante dos semanas en una cueva en Tailandia, que dejaron esta semana el hospital, realizarán un retiro espiritual en un templo budista antes de volver a la vida normal, anunciaron este domingo las autoridades locales.
"Realizarán un retiro de nueve días", declaró a la prensa el gobernador de Chaing Rai, Prachon Pratsakul.
"Once (de los doce niños) serán novicios y su entrenador se hará monje", explicó haciendo referencia al entrenador de fútbol Ekkapol Chantawong, que ya ejerció como novicio y ayudó a los niños a mantener la calma en la cueva hasta que fueron rescatados entre el 8 y el 10 de julio.
El jueves, un día después de su primera conferencia de prensa tras recibir el alta, el grupo participó de una ceremonia de acción de gracias tras pasar la primera noche en casa.
Los chicos acudieron al templo Wat Phra That Doi Wao de Mae Sai, la población de la provincia de Chiang Rai en la que vive la mayoría de ellos, acompañados de familiares.
Todos ellos realizaron un ritual dirigido a garantizar una vida larga y próspera junto a otro para, de acuerdo con la tradición budista, ganar mérito en favor de Saman Kunan, el veterano buzo tailandés que falleció durante las operaciones de rescate.
(Con información de AFP y EFE)