Pronta recuperación la del padre de Meghan Markle. Apenas días después de una cirugía de corazón ya está tomando un café de Starbucks. Bien cargado de azúcares en varios formatos, crema de leche batida incluida.
El ex director de iluminación fue captado en Rosarito, México, pasando por el servicio de ventanilla de la tienda y llevándose un café helado. No parece muy sano para la presunta convalecencia de un paciente recién operado del corazón.
Thomas Markle no pudo asistir a la boda real ya que según el Palacio de Kensington debió someterse a un procedimiento quirúrgico tras haber sufrido un ataque al corazón en la segunda semana de mayo.
El príncipe Carlos, padre de Harry fue quien asumió el rol y llevó a su ahora nuera hasta el altar.
Resulta llamativo -y preocupante para su salud- que el hombre esté consumiendo una de las bebidas que contienen más azúcar y calorías del popular establecimiento de café apenas unos días después de una importante intervención médica.
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