El fuego empezaba a cubrirlo todo, y las huéspedes habían quedado encerradas en sus habitaciones. La única salida eran los ventanales del quinto piso en el que se encontraban.
Las dos se asomaron y quedaron un rato en el borde del precipicio. Había muchas personas reunidas abajo, algunos también pasajeros, pero otros, transeúntes.
Todos les hacían señas para que no se tiren. Los bomberos ya estaban por llegar e iban a poder rescatarlas. Pero no pudieron convencerlas.
La primera de las mujeres se lanzó, cayó sobre un cable de alta tensión y luego fue atajada por la gente. Resultó gravemente herida, pero está fuera de peligro.
La segunda no quería saltar. Un vecino que estaba cruzando la calle grabó el momento en que trató de pasar a un edificio contiguo, pero sin éxito. Al intentarlo, se soltó y cayó al vacío.
Se estrelló contra un auto que estaba aparcado en la puerta. Fue trasladada a un hospital cercano en estado crítico.
Otras dos personas que prefirieron resguardarse en las habitaciones del Hotel Alican fueron rescatadas por los bomberos. Estaban intoxicadas por inhalación de humo.
Tras apagar el fuego, los servicios de emergencia inspeccionaron el lugar en el que se originó. La primera hipótesis es que se desató por el estallido de un cargador de baterías.
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