El Pentágono afirmó este martes que la amenaza de China y Rusia, países que en los últimos tiempos "han elegido convertirse en adversarios" de Estados Unidos, son su "principal prioridad".
"China y Rusia han elegido convertirse en adversarios (…). En estos momentos, la principal prioridad del Departamento de Defensa son la amenaza de largo plazo que representan China y Rusia", aseguró el secretario del Departamento de Defensa, James Mattis, ante el Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes de Estados Unidos.
El jefe del Pentágono compareció ante la Cámara baja para defender la necesidad de que el Congreso apruebe una partida de 7.000 millones de dólares en el presupuesto federal de este año fiscal para su Departamento, para así financiar la nueva Estrategia de Defensa Nacional (NDS, por sus siglas en inglés).
"Serían suficiente. Pero no contar con ellos nos pondría en la posición de tener que cambiar la NDS y hacer frente mayores riesgos. Además, daría una imagen de debilidad ante nuestros adversarios", advirtió Mattis.
El general retirado acusó a Rusia de haber violado el espíritu del tratado New START de reducción de armas estratégicas, firmado en 2010 por Washington y Moscú, porque -según dijo- si bien el Kremlin ha reducido el volumen de su arsenal, al mismo tiempo ha "modernizando y diversificado" sus armas nucleares.
En reiteradas ocasiones el Pentágono ha acusado a Rusia de desarrollar armamento nuclear de bajo rendimiento que, por un lado, no viola los actuales acuerdos de no proliferación y, por el otro, permitiría a Moscú ordenar un ataque devastador sobre un campo de batalla que no justificaría una respuesta nuclear desproporcionada.
Esta es, precisamente, una de las principales preocupaciones del Pentágono, tal y como queda plasmado en su Revisión de la Postura Nuclear (NPR), que fue presentada el pasado viernes y que, entre otras medidas, aboga por incorporar los conocidos como misiles de bajo rendimiento a su flota de submarinos nucleares.
"Nosotros queremos tener la certeza de que se dan cuenta de que podemos responder de manera proporcionada, de que no tenemos que hacer uso de armas de alto rendimiento. Esa es la disuasión", explicó el secretario de Defensa.
En similar sentido se refirió a China, país al que acusó de estar invirtiendo grandes cantidades de dinero para modernizar sus Fuerzas Armadas, lo cual "no puede ser ignorado" por Washington.
"Está modernizando y expandiendo su ya considerable arsenal nuclear, desarrollando alternativas atómicas completamente nuevas. Además, está modernizando también su Ejército convencional con el objetivo de desafiar la superioridad de Estados Unidos", expuso.
La nueva Estrategia de Defensa Nacional, que fue hecha pública por el propio Mattis el pasado 19 de enero, deja claro que, en el capítulo de Defensa, la mayor preocupación para la Casa Blanca de cara al futuro es "la competición entre grandes poderes", incluso por encima del terrorismo, que pasa a un segundo plano.
Con información de EFE
LEA MÁS: