Miles de personas protestaron este domingo frente a la embajada de Estados Unidos en el Líbano por la decisión del presidente Donald Trump de reconocer Jerusalén como la capital de Israel, una tensa situación que derivó en choques con las fuerzas de seguridad locales.
La policía de Beirut lanzó gases lacrimógenos y los equipos de Defensa Civil emplearon cañones de agua para dispersar a los manifestantes, que lanzaron botellas y prendieron fuego a neumáticos y contenedores de basura en la zona de Aukar, próxima a la sede diplomática.
De acuerdo a un corresponsal de la agencia AFP, se reportaron heridos aunque la información no pudo se corroborada por otra fuente.
Los manifestantes llevaban banberas de Palestina y del Líbano, y quemaron una imagen de Donald Trump. Entre los presentes había miembros de grupos islamistas y de izquierda del país anfitrión, así como también militantes de partidos palestinos.
También lanzaron piedras contra las fuerzas de seguridad y quemaron banderas de Israel y Estados Unidos.
El Líbano es hogar para cerca de 450.000 de refugiados palestinos ubicados en 12 campos, tres de los cuales se sumaron a las protestas: Badaui, Burj al Barajneh, y Ain al Hilwe.
Por otro lado Israel y el Líbano mantienen una tensa relación debido en parte al grupo terrorista Hezbollah, nacido en esta tierra y actualmente parte del gobierno. Los países protagonizaron una guerra en 2006, cuando Israel invadió a su vecino del norte para frenar los ataques de la guerrilla.
En los pasados días se han registrado manifestaciones en varios países árabes y musulmanes en contra del traslado de la Embajada estadounidense a Jerusalén, en cuya parte oriental vive una mayoría de población musulmana palestina.
Con información de AP, AFP y EFE
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