Cada semana, los jóvenes se paran frente a las cámaras y toman una droga diferente. Muestran en detalle cómo se preparan para consumirla y cuentan, en los minutos siguientes, cuáles son los efectos que van sintiendo en su cuerpo. También dan consejos sobre cuáles son las maneras seguras para hacerlo y previenen sobre los problemas que pueden traer a la salud. Todo ocurre en el set de filmación de Drugslab (Laboratorio de drogas), un canal de YouTube que ya cuenta con más de medio millón de seguidores. Y algo más: el programa cuenta con el auspicio gubernamental.
Difícil de creer si el país de origen de esa producción no fuese Holanda, una de las naciones más liberales en su política de drogas.
Nellie Benner, Bastiaan Rosman y Rens Polman prueban en cámara drogas recreacionales con el objetivo de educar a los espectadores sobre sus efectos en el cuerpo y el cerebro.
El funcionamiento del canal de YouTube es simple. Los seguidores dejan sus sugerencias sobre qué drogas les gustaría que los conductores probaran en cámara, y ellos van seleccionando de esa lista y realizan una nueva experiencia cada semana.
Los conductores cuentan la historia de la droga que están por probar y luego monitorean su temperatura corporal y su pulso, mientras describen sus sensaciones y dan indicaciones sobre qué cosas es seguro realizar y qué cosas no, bajo sus efectos.
Así, han probado en cámara cocaína, éxtasis, speed, éxtasis, marihuana, peyote y salvia, entre muchas otras.
El show, que cuenta con el auspicio de Ministerio de Educación, Cultura y Ciencia de Holanda, comenzó en septiembre y sube un nuevo episodio cada viernes. Aunque es en holandés, gracias a los subtítulos en inglés de YouTube, sus espectadores se han multiplicado en pocas semanas por miles alrededor del mundo.
La idea que trasciende el programa es que "informarse es mejor que mantenerlo en silencio, después de todo, vivimos en una era en que los jóvenes entran en contacto con las drogas, nos guste o no", explicó Benner al sitio Vocativ.
La laxitud de la política holandesa respecto a las drogas es motivo de debate permanente dentro y fuera del país. Las estadísticas oficiales muestran que el país tiene una de las tasas más bajas de adicción a las drogas duras en la Unión Europea, y un estudio de Universidad de Berkely ha demostrado que incluso la tasa de consumo de cannabis en Holanda es menor a la de muchos de sus vecinos europeos con políticas más rígidas
LEA MÁS: