El primer ministro libanés, Saad Hariri, anunció este sábado por sorpresa su dimisión, acusando a Hezbollah y a su aliado Irán del "control" en Líbano y citando amenazas para su vida.
"Anuncio mi dimisión del puesto de primer ministro", declaró Hariri, quien se encuentra actualmente en Arabia Saudita, en un discurso retransmitido por la cadena de noticias Al Arabiya.
Había sido nombrado para el cargo, que ocupaba por segunda vez, hace un año. Es un millonario libanés cuyo padre, Rafic, también fue primer ministro y murió asesinado en 2005.
El pasado 11 de octubre, el ministro de Defensa de Israel, Avigdor Lieberman, había dicho que el grupo terrorista Hezbollah se había hecho con el control de las Fuerzas Armadas del Líbano (FAL), el Ejército del vecino del norte que está apoyado por los Estados Unidos.