La bautizaron la "princesa polar". Tenía 35 años cuando murió y fue momificada. Fue hallada próxima al Círculo Ártico. Su pelo y sus pestañas estaban intactas, luego de 900 años de permanecer enterrada. Era la única mujer enterrada junto a una treintena de hombres. La trascendencia de la elegida era absoluta.
Lo que llamó la atención de los científicos que la descubrieron era el perfecto estado en el que se encontraba su rubia cabellera. Los restos verdes en su rostro son dejos de cobre derretido que los embalsamadores habrían utilizado para preservar su aspecto.
La "princesa polar" fue hallada en Zeleny Yar, un lugar cercano a Salekhard, Rusia, según consignó el diario The Siberian Times. Según los científicos que trabajaron en el sitio, perteneció a una misteriosa civilización medieval dedicada a la caza y la pesca. Sin embargo, mantenían lazos con la por entonces poderosa Persia.
Los expertos ahora piensan en realizar una reconstrucción total del rostro de la mujer, quien fue la única entre tantos hombres, lo que los llevó a determinar que se trataba de una persona de la elite de la civilización.
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