El jefe de policías de Malasia, Khalid Abu Bakar, confirmó que hubo intentos de robo en la morgue donde conservan el cuerpo del hermano del dictador norcoreano.
"Sabíamos que alguien estaba intentando entrar a robar a la morgue del hospital. Tuvimos que tomar precauciones. No permitiremos que nadie altere el trabajo en la morgue" dijo.
Además, agregó que los investigadores saben quien intento entrar pero se rehusó a compartir la información: "no hay necesidad de contarles," sostuvo.
A pesar de no revelar al involucrado, el intento arroja más sospecha con respecto a la participación del país comunista en el asesinato. En reiteradas ocasiones, la embajada norcoreana reclamó el cuerpo del hermano del dictador. Corea del Sur afirma que el homicidio fue organizado por agentes trabajando para Kim Jong-un. La seguridad de la instalación fue reforzada.
La autoridades buscan a 4 norcoreanos que huyeron del país el día del asesinato. Entre ellos, uno fue identificado como Kim Uk-il, vinculado a la aerolínea Air Koryo de Corea del Norte, y otro se trata del segundo secretario de la embajada, Hyon Kwang-song.
"No están bajo custodia; solo los hemos llamado para que colaboren," concluyó.
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