En la ciudad rusa de Novi Urengói, un joven subió al techo de un edificio, intentó tomarse una selfie y el movimiento lo llevó a precipitarse hacia el vacío.
Identificado con el nombre de Tamerlan A., pasó 10 minutos colgando del borde del edificio e intentando subir para ponerse a salvo sin éxito hasta que sus fuerzas se terminaron y cayó nueve pisos sobre un automóvil estacionado, lo que le provocó la muerte de manera instantánea.
Se desconocen los motivos por los que el joven se encontraba en el techo y al borde del abismo tratando de capturar una foto, una teoría sostiene que se trataba de "su última foto" antes de suicidarse y al precipitarse al vacío cambió su intención aunque fue en vano.
El personal médico del distrito ruso de Yemalia-Nenetsia que se hizo presente en el lugar luego de la tragedia afirmó que la víctima, de 19 años, murió en el instante por la fuerte caída.
"Discutió con su novia antes de subir a la terraza" afirmó uno de sus amigos presentes luego del hecho. El video provocó la indignación no sólo por el motivo que lleva a la muerte al joven, sino por los responsables de filmar durante tantos minutos sin pedir la ayuda correspondiente para evitar el trágico final.
Algunos medios de prensa locales reportaron que unas siete personas intentaron acceder al techo del edificio para ayudar al joven pero que no se les permitió el ingreso.
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