A 71 años de las bombas atómicas de Estados Unidos contra Japón, circularon imágenes inéditas del día después del ataque a la ciudad de Nagasaki. Fueron tomadas por el fotógrafo militar Yosuke Yamahata, quien documentó la destrucción con desgarradoras capturas.
Escombros, edificaciones destruidas, paisajes opacados por humo espeso y apenas un puñado de sobrevivientes es la angustiante realidad retratada por Yamahata, a tan sólo 12 horas del devastador bombardeo norteamericano sobre suelo japonés.
El fotógrafo tuvo la tarea de documentar la destrucción con fines propagandísticos.
En 1952, parte de su trabajo, que es considerado el registro más completo de las secuencias del ataque, fue publicado en la revista Life.
Sin embargo, algunas fotografías fueron confiscadas por un policía militar norteamericano, cuya identidad no fue revelada.
La confiscación fue ordenada por el general Douglas MacArthur, de acuerdo con lo consignado por Daily Mail. La instrucción era destruir cualquier tipo de imagen y material sobre la devastación provocada por las bombas atómicas.
La policía militar se apoderó de las imágenes, pero nunca las destruyó.
Recién ahora, 71 años después del ataque, salieron a la luz. Se venderán el 25 de septiembre en una subasta de Estados Unidos por unos 40.000 dólares.
El álbum completo contiene 24 fotografías obtenidas a partir de los negativos de Yamahata.
Sobre el final de la Segunda Guerra Mundial, el 9 de agosto de 1945 Estados Unidos realizó un ataque nuclear sobre Nagasaki, tres días después de bombardear Hiroshima. Seis días después, Japón se rindió.